Brexit
Picardo desmiente un rumor que apunta al inminente anuncio de un acuerdo sobre Gibraltar

Con la mosca detrás de la oreja

Real Balompédica Linense

La Balona denuncia la actitud hostil del colegiado del pasado domingo, que además hurtó dos penas máximas a los albinegros · El Comité designa para el encuentro en Melilla a otro árbitro extremeño

Ceballos Silva, con la cartulina roja en la mano, durante un partido.
Redacción / La Línea

16 de octubre 2012 - 05:02

Cuando aún no se han acallado los ecos del malestar en la Real Balompédica Linense por la actuación del colegiado de Zafra Víctor García Maqueda, que hurtó a los albinegros dos penaltis en su partido del pasado domingo en el Municipal ante La Roda (1-1), el equipo de La Línea ya sabe que le espera otro árbitro extremeño dentro de cinco días en Melilla, el cacereño Andrés Manuel Ceballos Silva. La conducta del trencilla en la última jornada no ya dentro, sino incluso fuera del terreno de juego, ha indignado al conjunto balono, según denunció ayer el delegado, Joaquín Jiménez.

La Balona -como por otro lado suele suceder cuando los equipos no acaban de carburar- se siente perjudicada por los árbitros. No cabe la más mínima duda de que Víctor García Maqueda le jugó una mala pasada el domingo al ignorar primero una clara mano de Pelegrina y más tarde un derribo de Góngora a Copi, ambos dentro del área de La Roda. Pero la queja va mucho más allá.

Joaquín Jiménez desveló ayer en el programa Tiempo de Juego Campo de Gibraltar que el colegiado segedano ya antes del choque intentó aparcar su vehículo dentro del estadio, algo que podía hacerse hace unos años pero que después de la remodelación de la antesala de vestuarios resulta imposible. Poco antes del descanso amenazó con expulsar al propio delegado si los recogepelotas no cumplían escrupulosamente con sus funciones y que exigió al directivo que se colocase el brazalete que le identificaba como tal. "En doce años, jamás me había pasado algo así", recalcó Jiménez, que se sorprendió de la actitud hostil de un colegiado que jamás había visitado La Línea.

En medio de esa sensación de indefensión, que comenzó a gestarse en la eliminatoria de Copa con el Melilla con aquella otra pena máxima no decretada sobre Copi en el arranque de la segunda mitad, el Comité designa un segundo árbitro extremeño, aunque, para ser fieles a la verdad hay que advertir que ya lo había decidido antes de que se celebrase el duelo que enfrentó a los linenses con La Roda.

El encargado de impartir justicia en el Álvarez Claro de Melilla será el cacereño Cebalos Silva, hijo del tristemente desaparecido Ceballos Borrego, que incluso participó en alguna edición del Ciudad de La Línea.

Ceballos Silva, sin embargo, no es precisamente un juez de mal recuerdo para la Balompédica. La pasada andadura dirigió el Balona-Puertollano (3-1) que se disputó en el Municipal y en el que, en opinión de este periódico, mereció un notable como calificación.

Había pasado más de una década desde que este colegiado y la Balompédica habían entrecruzado su camino, ya que el anterior precedente se remontaba a al 10 de diciembre de 2000 en San Pablo, en un partido ante el Écija Balompié que acabó con empate sin goles.

El colegiado, que lleva 23 años dedicado al arbitraje, llegó a militar en la Liga Adelante, pero perdió la categoría. Andrés Manuel Ceballos Silva (15/07/1973) es técnico de telefonía.

6 Comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último