Un punto épico que vale la cuarta plaza

Un puntito con un amplio regusto a épica. Un punto que demuestra que la derrota ante el Écija de una semana antes no fue más que uno de esos accidentes que, indefectiblemente, salpican una temporada. La Balompédica rescató su premio del Nuevo Colombino cuando jugaba con diez y lo hizo merced a un tanto de ese Dennis Nieblas que cada vez parece más un héroe por accidente. Seis son ya los desplazamientos de los albinegros sin conocer la derrota. Tres, en el presente curso. Y el equipo de La Línea que vuelve a situarse en la zona VIP de la clasificación, porque ya está en esa cuarta plaza que separa la gloria absoluta del éxito sin más que tantas veces se confunde con la frustración.

Esta Balona podrá ganar o perder, pero después de seis jornadas ya casi se puede garantizar que nunca va sonrojar a sus hinchas. Ayer, ante más de diez mil personas y en inferioridad numérica echó mano de su amor propio para firmar unas valiosas tablas, que no sólo arrojan un beneficio clasificatorio -porque le permite escalar a la cuarta plaza- sino moral, porque viene a poner negro sobre blanco ese convencimiento de que aquella primera derrota fue más una cuestión estadística que otra cosa. Y es que este empate en el coliseo del equipo más antiguo de España lo logró ante un rival que tiene un buen puñado de nombres que hace nada estaban en Segunda A y al que su afición venía exigiendo desde el lunes que ofreciese su mejor versión.

De principio el Recre tomó el balón y los linenses -ayer completamente de negro- exhibieron las virtudes que les caracterizan: fueron un equipo solidario, muy ordenado, con la lección muy bien aprendida, pero, todo hay que decirlo, casi sin proyección en ataque, como demuestra que su primer saque de esquina llegase en el minuto 26.

De hecho las dos únicas ocasiones/ocasiones antes del descanso fueron para el Decano. En el 10' Carlos Lazo disfrutó de demasiado tiempo para pensar en el área y le pegó con mucha mala leche, pero el palo se interpuso en sus intenciones. En el 32' Santi Luque recorrió medio campo sin encontrar oposición y se la puso a Boris en el mismo borde del área pequeña, pero éste se precipitó en el golpeo y mandó directamente fuera.

La única réplica de los visitantes llegó en el 36'. Sergio Molina, demasiado intermitente otra vez, envenenó un golpe franco, pero Marc Martínez estuvo avispado.

Nada más arrancar la segunda mitad se veía que la Balona no se contentaba con lo que estaba haciendo, que quería más. Empezó a tener más el esférico, a merodear con más frecuencia el área del Decano.

Y fue precisamente cuando más equilibradas estaban las fuerzas cuando marcó el de casa. En el 60' Rafa de Vicente apenas encontró oposición mientras colocaba el dedo en el gatillo y soltó un derechazo que se envenenó por el camino y se coló por la escuadra.

Todavía estaba celebrando el tanto el equipo albiazul cuando su técnico introdujo dos cambios y al momento replicó Julio Cobos, que precindió de Ismael Chico y dio entrada a Stoichkov, en lo que era toda una presentación de intenciones.

En el 74' los linenses reclamaron un penalti a Wilson Cuero que no parecía serlo y entre escarceo y escarceo llegó el 83'. A Luis Madrigal, que ya tenía una amarilla y que había sufrido mucho con Carlos Lazo, se le fue la mano en una falta y el árbitro lo mandó a la caseta. Muchos de los presentes entendieron que era una forma implícita de asumir que el final había llegado.

Pero había alguien que no estaba de acuerdo. Julio Cobos retiró a Sergio Rodríguez y dio entrada a Juampe para defender con tres. Era el todo o nada. Y salió casi todo.

En el 86' y en un córner Wilson Cuero tocó con la cabeza un balón muy bajo, Traoré medio despejó, medio se encontró con el balón, éste quedó muerto y Dennis Nieblas, que había subido a rematar, fue el más listo e introdujo el esférico en el marco.

A partir de entonces fue un querer y no poder del Decano, que atacó sin orden y estrellándose en una Balona que otra vez se tuvo que reconstruir sobre la marcha y que defendió como un solo hombre.

El pitido final deja un empate de esos de entrenador. De haber sabido mover las piezas. Y devuelve a la Balona, si es que alguien cometió el error de ponerlo en duda, a su verdadera realidad, la de un equipo que no debe renunciar absolutamente a nada.

Marc Martínez H

Mario l

Casado H

Sergio HH

Julio HH

Jonathan Vila H

(Traoré 60') l

Rafa de Vicente HH

Boris l

Gorka l

(David Segura 60') s.c.

Santi Luque H

(Carlos Calvo 80') s.c.

Carlos Lazo HH

Montoya H

Sergio Rodríguez H

(Juampe, 83') H

Madrigal l

Joe HH

Dennis Nieblas HH

Ismael Chico HH

(Stoichkov 70') s.c.

Gato H

(Zamorano 76') s.c.

Sana HH

Wuilson Cuero H

Sergio Molina H

José Ramón H