"Si algo ha quedado demostrado es que la Balona me importa y mucho"

David Miguélez aún no sabe si podrá despedirse el domingo de la afición de la Balona. La lesión que sufrió en el Municipal frente al Granada y que le ha dejado en el dique seco desde entonces amenaza con privarle de ese derecho. El asturiano quiere hacerlo sobre el césped, pero no lo tiene claro. "Si lo estoy intentado es porque me haría ilusión, pero el tema es que yo pueda jugar bien. Sería un poco triste despedirme como lo tuve que hacer contra el Granada", dice. Poco antes del que será, dentro del rectángulo de juego o no, su último partido para la Balona, se somete al análisis propio de la hora del adiós de un futbolista que a nadie ha dejado indiferente.

-Usted habla de su despedida como un hecho consumado, cuando el club no ha hecho pública ninguna lista de descartados.

-Bueno, pero se ha dado a entender hace tiempo.

-Dando por buena esa afirmación, ¿qué sensaciones le produce saber que dejará la Balona?

-Para mí es muy triste, por supuesto. Después de cinco años en La Línea irme supone tener que separarme de muchos amigos y de mucha gente que me trata como si fuese de su familia. Yo entiendo que he demostrado, a pesar de los últimos acontecimientos, que me importa y mucho este club, lo que pasa es que se han dado una serie de condicionantes que se han vuelto contra mí. Pero ya digo, hace tiempo que he dejado claro que la Balompédica me importa y mucho.

-¿Tiene la sensación de que buena parte de la decisión de que abandone el club tiene que ver con su firma en aquel manifiesto en el que doce jugadores reclamaban los salarios impagados?

-No lo sé. No es una pregunta que yo pueda contestar.

-La pregunta no es si es verdad o mentira, sino si usted tiene esa sensación.

-La sensación es que yo he estado dos veces en Segunda B, con el Vecindario y el Lugo, y he decidido venirme a la Balona en Tercera. Son dos hechos indiscutibles y muy a mi favor. Creo. En mi opinión son cosas que demuestran que este club me importa porque si he decidido dos veces venirme antes de seguir en Segunda B será por algo. También entiendo que el club va a cambiar de filosofía y que por cuestiones económicas va a contar con gente de la zona. Y yo soy de muy lejos y además vivo de esto.

-A lo mejor en otras circunstancias la Balona y Miguélez, aun viviendo del fútbol, podrían haber llegado a un acuerdo. Usted no es de La Línea, pero se le podría considerar un asimilado.

-Claro que podría haber habido un acuerdo ¿por qué no? Yo ya he demostrado que mi prioridad no era el dinero, lo que pasa es que ya digo que el club parece que quiere contar sólo con gente de la zona. A mí me gusta estar aquí, la afición me ha dado un apoyo grandísimo, pero hay veces que se acaban los ciclos y creo que éste se ha acabado.

-Si pudiese volver atrás ¿fiormaría el manifiesto de marras?

-Sí. Nunca hay que arrepentirse de lo que se hace. De todas formas yo creo que se han dado circunstancias en mi opinión inesperadas para todo el mundo. Ahora sólo queda aceptar las cosas como son y que cada uno haga lo que entienda oportuno. Lo que sí quiero que quede claro es que ese papel se firmó para el bien de todos, no para el mal de algunos.

-¿Se va Miguélez jodido al ver que deja a la Balona en Tercera?

-Claro que sí, es evidente ¿no? Es que yo en La Línea he vivido muchas cosas y la Balompédica no es un club cualquiera. Hay veces que estar en un sitio y sabes que es de paso, pero no es éste el caso, yo siento muchas cosas por este equipo, por su afición y por la gente de La Línea. En el campo no nos hemos merecido el descenso, el fútbol ha sido un poco injusto con nosotros esta temporada.

-¿Realmente han hecho los futbolistas todo lo que podían?

-Cuando desciendes es porque no lo has hecho. También es verdad que en el campo han pasado cosas muy raras. Es evidente que cuando no ganas un día y otro es porque haces cosas mal, pero estoy convencido de que no hemos merecido acabar ahí.

-Dando por hecho de que Miguélez no jugará la próxima temporada en la Balona ¿la puerta ha quedado cerrada?

-No, aquí no. Nunca.

-Y de los cinco años que ya ha vivido en la Balompédica ¿qué minuto le gustaría revivir?

-El del ascenso, ese momento en el que pita el árbitro el final en Miranda. Con independencia de la ilusión que yo sentía, lo que tengo grabado es las caras de los demás. Aún se me ponen los pelos de punta. No es lo mismo contarlo así, en un momento, que estar tres años peleando por algo y sentir que al final lo has conseguido y que lo puedes compartir con gente de La Línea con la tengo mucho roce y se lo merecían, igual que ahora no se merecen que el equipo haya descendido.

-¿Cuál le gustaría que fuese el último mensaje de David Miguélez a la afición de La Línea?

-Lo primero de todo es que he demostrado sobradamente y con hechos sobradamente que el club me importa y los que conocen mi trayectoria lo saben. Pero por encima de todo quiero darle las gracias a la afición, que ha sido uno de los grandes motivos por los que he querido estar aquí y que me haya sentido futbolista y muy valorado. Sólo puedo tener palabras de agradecimiento, pero tanto a la afición como a la gente de La Línea, que me ha tratado como un linense más.