El agujero de la CAM triplica lo estimado, según el Sabadell

El consejero delegado de Banco Sabadell, Jaime Guardiola, afirmó ayer que las pérdidas esperadas en la CAM "se acercan más a 17.000 millones que a los 5.500" que baraja el Banco de España tras la auditoría de la entidad alicantina elaborada para el supervisor por Ernst & Young. El Sabadell cuenta con un Esquema de Protección de Activos (EPA) sobre una cartera problemática de activos de la CAM por 24.000 millones entre crédito promotor, suelo, edificios y obra en curso, así como préstamos para compra de vivienda y refinanciaciones, entre otros activos. Para cubrir esta pérdida potencial en la CAM se utilizarán en un primer lugar las provisiones constituidas sobre los activos de la caja alicantina por valor de 3.900 millones, lo que reduce el riesgo de la cartera problemática a algo más de 20.100.

Asimismo, y durante un plazo de diez años, el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), que se nutre de las aportaciones de las entidades financieras, asumirá el 80% de dichas pérdidas potenciales, mientras que el 20% restante correspondería a Banco Sabadell.

Guardiola estimó que pese a dicha pérdida potencial, el FGD cuenta con recursos suficientes para afrontar el proceso de la CAM sin necesidad de endeudarse o de que las entidades asociadas tengan que asumir derramas más allá de su aportación anual, del 2 por mil de los depósitos a partir de 2012.

El consejero delegado del Sabadell, que comparecía en un encuentro de la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), no descartó sin embargo que el FGD tenga que recurrir a dichas fórmulas para aumentar sus recursos en los procesos de reestructuración que se lleven a cabo tras el de la CAM, entre los que citó el de Unnim y el del Banco de Valencia.

Al ser preguntado sobre si el tamaño de la CAM, con activos de más de 70.000 millones, no le da vértigo, Guardiola sostuvo que el Sabadell "se siente fuerte" para asumir su cambio de dimensión, que le sitúa entre las cinco mayores entidades del sistema financiero español, ya que sus activos superan los 166.000 millones.