El millonario patrimonio que deja Mario Vargas Llosa tras su muerte

Los éxitos literarios de Mario Vargas Llosa se han traducido en una fortuna económica y patrimonial difícil de cuantificar, que tendrán que repartirse sus legítimos herederos, sus hijos Álvaro, Gonzalo y Morgana, que son los que se llevarán la mayor parte de su legado, tal y como estipula la ley en España, donde residen sus tres vástagos desde hace años. Al menos dos tercios de la herencia deben destinarse a sus hijos. El último tercio, denominado de libre disposición, podría dejarlo para lo que quisiera, aunque no se conoce que haya pensado en otros beneficiarios para su herencia. El autor de conocidas obras literarias como La ciudad y los perros o La fiesta del chivo habría acumulado una fortuna que se situaría alrededor de los 10 millones de euros.

Dar con las cifras exactas de su millonaria herencia parece un imposible, pero siempre se pueden hacer aproximaciones teniendo en cuenta los contratos, las sociedades y las propiedades que posee. En este último apartado, el Premio Nobel se hizo con propiedades inmobiliarias en Lima, Madrid, París, Londres, Nueva York y Punta Cana. Solo por el hecho de ser galardonado con el Premio Nobel de Literatura se embolsó cerca de un millón de euros. A ello hay que sumar la popularidad que alcanza tras el premio y los contratos que se firman a posteriori.

La periodista Pilar Eyre, con información cercana al escritor, ha apuntado que Vargas Llosa recibía cerca de 1,5 millones de euros como adelanto a cada nuevo libro. También había firmado contratos anuales que se acercan a los 200.000 euros por colaborar en reconocidos medios de comunicación como columnista. Unas cifras que se unen a la cantidad que percibía por derechos de autor, que sería unos 65.000 euros mensuales, más los ingresos por participar en eventos de prestigio y conferencias.

El dinero también le ha acarreado varios problemas. El escritor estuvo envuelto en la polémica de los Papeles de Panamá. Vargas Llosa y su exposa Patricia capitaneaban una sociedad offshore registrada en las Islas Vírgenes Británicas. El Premio Nobel negó tener conocimiento de dicha estructura y atribuyó la culpa a sus asesores financieros. En España también tuvo problemas fiscales. En 2021, su nombre fue incluido en la lista de grandes morosos de Hacienda debido a una deuda que superaba los 1, 1 millones de euros. Vargas Llosa regularizó su situación alegando que no se trataba de una evasión deliberada. No obstante, estas maniobras financieras ensuciaron su inmaculada imagen como referente de la cultura y las letras.