Nuevo colapso en la Verja: Gibraltar dificulta el paso de trabajadores españoles en vehículos de dos ruedas
PASO FRONTERIZO
Los agentes llanitos habilitan un único carril para el paso de motos, bicicletas y patinetes este lunes por la mañana
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Los agentes de Gibraltar destinados a controlar el paso por la Verja han vuelto a cerrar a primera hora de este lunes uno de los carriles de coches que, en hora punta, entre las 7:00 y las 8:00 de los días laborales, se habilita también para vehículos de dos ruedas a causa del gran número de trabajadores transfronterizos -en su mayoría, españoles- que acceden al Peñón en moto, bicicleta y patinete.
Esta decisión de dejar un único carril para vehículos de dos ruedas ha provocado enormes retenciones de empleados, las primeras del año 2024, que intentaban entrar en Gibraltar desde La Línea y ha afectado también al tráfico de coches.
Los afectados califican esta situación de "lamentable" como una "historia interminable", según algunos comentarios escritos en diversas redes sociales, a la vez que se preguntan a qué hora tendrán que salir de sus casas en próximos días para llegar puntuales a sus puestos de trabajo.
La Asociación de Trabajadores Españoles en Gibraltar (Ascteg) tacha al Gobierno de Gibraltar como responsable del estrechamiento y achacan estas colas matinales a "un problema de descoordinación de la entrada de vehículos de dos ruedas". Desde esta asociación han indicado que esperan "que no se produzcan más" esas colas en la Verja para acceder los trabajadores transfronterizos, "porque se podría entrar en un ciclo de acusaciones políticas e interesadas a ambos lados que siempre son negativas para las comunicaciones, negociaciones y el buen entendimiento".
Antecedentes
El problema no es nuevo. A mediados de diciembre, los agentes llanitos obligaron a los vehículos de dos ruedas a converger con los coches que circulaban, incluso de dos en dos, por el mismo carril, lo que terminó por colapsar el paso, igual que este lunes 15 de enero.
Meses antes, en septiembre, las autoridades gibraltareñas se vieron obligadas, a regañadientes, a habilitar un segundo carril para acelerar la fluidez de motos, bicicletas y patinetes tras algunos incidentes de caos circulatorio en la Verja.
Con la negociación del Brexit como eterno marco de fondo aún por solventarse, miles de los trabajadores transfronterizos que cruzan a diario desde el Campo de Gibraltar hasta la Roca siguen padeciendo estas largas esperas impredecibles.