La Comisión de Desarrollo y Planificación de Gibraltar ha aprobado de forma definitiva la construcción del nuevo Hotel Caleta, un complejo de lujo de 136 habitaciones que gestionará Hilton en la cara este del Peñón, y tres bloques de viviendas. El proyecto ha cambiado respecto al plan inicial, que en 2022 obtuvo la licencia de obras con la condición de que se revisaran los diseños debido al fuerte impacto visual que generaría sobre el entorno. 

Inaugurado en 1964, el antiguo Hotel Caleta cerró sus puertas a finales de 2021, pero los propietarios, la familia Callaghan, presentó posteriormente una solicitud para levantar nuevo hotel de lujo en el lugar que cambiará la cara este de la Roca.

Los nuevos diseños reordenan la disposición de los edificios e incorporan un nuevo concepto para el hotel, con alturas escalonadas que reflejan el perfil de la bahía y las laderas del Peñón. La esencia de la propuesta sigue siendo la misma: un hotel de 126 habitaciones y 112 apartamentos repartidos en otros tres edificios residenciales.

El hotel tendrá 11 plantas con un perfil escalonado, mientras que los edificios residenciales estarán divididos de la siguiente forma: uno de los bloques de viviendas tendrá 13 plantas y 32 apartamentos; otro constará de 15 plantas y 38 apartamentos y el tercero tendrá 17 plantas y 29 apartamentos.

Los edificios que formarán el complejo.

GCA Architects, en nombre del promotor y operador hotelero G&JB Hotels Ltd, explica en la declaración de planificación los cambios en el diseño para tener en cuenta las cuestiones planteadas por la Comisión de Urbanismo. Una de las claves era suavizar el impacto visual del proyecto sobre las viviendas de Catalan Bay, principalmente cambiando no sólo el diseño de los edificios sino también la distribución.

Una de las principales preocupaciones expresadas en 2022 era que, en el diseño original, el bloque residencial situado al norte del hotel hacía que se perdiera la integración visual del complejo con las casas de Catalan Bay y que esto podía debilitar el vínculo social y comunitario.

El nuevo diseño traslada el edificio residencial que originalmente estaba en el norte a la parte sur, "liberando esa parcela para que el hotel recupere su posición dominante con vistas a Catalan Bay", dice la declaración de planificación. "Esto a su vez le permite volver a adquirir un vínculo físico y visual directo con la comunidad", indica.

Recreación del acceso al hotel.

La propuesta original también fue criticada por su excesiva masa horizontal, sobre todo en la zona residencial sur. Los diseñadores estudiaron opciones para resolver este problema dividiendo esta masa edificatoria. "Se ha pasado progresivamente de un volumen único a tres torres verticales distintas, en las que la altura añadida ha permitido formas más esbeltas que reducen la carga visual", dice la declaración de planificación. "Las nuevas formas también permiten que la luz y el aire penetren más allá de las torres hacia Sir Herbert Miles Road. La nueva configuración logra paradójicamente una reducción de la masa percibida a pesar de ganar altura real en dos de las torres", indica el documento.

Los diseñadores también abordaron las preocupaciones sobre la sombra que el desarrollo podría proyectar sobre Catalan Bay, aunque los estudios indican que esto sólo era un problema durante los meses de invierno. "La nueva configuración sigue el ángulo natural de incidencia del sol", indica el escrito presentado por los promotores. 

Un edificio escalonado

Otra de las preocupaciones de Urbanismo también era la desproporción entre el diseño original y las viviendas de Catalan Bay, ya que entendía que la transición entre ambos tenía que ser menos acusada. Para contrarrestar esta problema, el nuevo diseño presenta un edificio escalonado para tratar de resolverlo en parte. Los arquitectos también han explorado nuevas formas de crear "más armonía" entre el proyecto y las viviendas existentes.

Uno de los miradores del complejo.

"Se trata de formas abstractas de piedra que reflejan el volumen y la escala de los edificios de Catalan Bay y los trasladan al primer plano de la fachada de la nueva urbanización", explica la declaración de diseño. "Esto relega la escala real de la urbanización a un plano de fondo y proporciona una línea visual de continuación que suaviza la transición y conecta lo nuevo con lo antiguo", indica.

La declaración también señalaba que, como resultado de estos cambios de diseño, el edificio ha sufrido pequeñas modificaciones en su distribución interna. Entre ellos se incluyen aspectos como la ubicación de instalaciones y equipos, las recomendaciones de ingeniería contra incendios, los requisitos de la marca de hoteles de 5 estrellas y las necesidades comerciales.

La nueva propuesta señala que existen dificultades para proporcionar un carril bici de 1,5 m debido a las limitaciones de anchura de la calzada y en su lugar, se propone una zona peatonal y ciclista compartida a lo largo de la fachada de la urbanización. El proyecto incluye un amplio aparcamiento para bicicletas en los sótanos.

En cuanto al transporte público, la propuesta prevé una parada de autobús y la designación de zonas de espera para taxis en la explanada del hotel.