La Unión Europea aplaza sin fecha la introducción del sistema de entradas y salidas de viajeros que se iba a aplicar en Gibraltar

Gibraltar/La introducción del nuevo sistema europeo de entradas y salidas para viajeros de terceros países (ETIAS), prevista inicialmente el 10 de noviembre, será finalmente aplazada debido a que Francia, Alemania y Países Bajos no están aún preparados, según ha explicado la comisaria europea de Interior, Ylva Johansson. Estaba previsto que este sistema se aplicara para entrar y salir de Gibraltar mientras no hubiera acuerdo para un Tratado con la UE sobre la futura relación del Peñón tras hacerse efectivo el Brexit.

"El 10 de noviembre no está sobre la mesa. Espero que podamos introducirlo lo antes posible, pero no hay fecha", señaló la comisaria este jueves en rueda de prensa al término de una reunión de ministros europeos de Interior.

Johansson añadió que el momento de introducción del sistema dependerá de un examen legal que habrá que llevar a cabo y anunció que la próxima semana tendrá lugar una reunión para abordar el asunto.

El nuevo sistema que pretende implantar la UE, denominado EES (Entry Exit System, Sistema de Entradas y Salidas) es un sistema informático automatizado que escaneará los pasaportes y proporcionará datos biométricos -huellas dactilares e imágenes faciales- y mantendrá un registro electrónico de los nombres de los viajeros y las fechas y lugares de entrada y salida.

Este mecanismo sustituirá de forma efectiva la práctica actual de sellar manualmente los pasaportes y poder calcular así el tiempo de permanencia en el Espacio Schengen. También será aplicado en la Verja de Gibraltar en caso de no mediar antes un acuerdo para regular el encaje de la colonia en la UE tras el Brexit.

Cuando entre en funcionamiento, los ciudadanos de fuera de la UE que viajen al área Schengen y estén exentos del requisito de visado deberán registrarse y obtener una autorización antes de viajar. Previamente a esos desplazamientos, el sistema comparará a los viajeros con las bases de datos sobre fronteras, seguridad y migración, lo que ayudará a identificar de antemano a las personas que puedan suponer un riesgo desde el punto de vista de la seguridad o la salud.

Aunque se esperaba que el nuevo sistema estuviera operativo a finales de 2022, la entrada en vigor ha ido aplazándose.