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La Audiencia Provincial paraliza la obra de los juzgados linenses

La comunidad de propietarios no autorizó los trabajos, por lo que presentó una denuncia El juzgado número 4 se ha trasladado a la entreplanta, que no tiene licencia de ocupación

R. Máiquez La Línea

24 de septiembre 2016 - 01:00

Una sentencia de la Audiencia Provincial de Cádiz con sede en Algeciras ha paralizado de forma cautelar las obras que se llevan a cabo en los bajos de un edificio de la calle Feria para instalar en este lugar las cuatro sedes judiciales de La Línea. El fallo, emitido el pasado martes, da la razón a la comunidad de propietarios Real Velada, que interpuso una denuncia contra la promotora que lleva a cabo los trabajos, ya que los vecinos no autorizaron la obra porque iba a afectar varias zonas comunes. En un primer momento el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de La Línea desestimó esta denuncia, pero tras presentar un recurso la Audiencia Provincial da la razón a los vecinos y obliga a que se paralicen los trabajos.

La situación en la que se queda el Juzgado de Instrucción número 4 es bastante complicada, ya que su sede ha sido trasladada esta misma semana desde la planta baja a la entreplanta, que aún no cuenta con la perceptiva licencia de primera ocupación. La solución más lógica es que el juzgado sea trasladado de nuevo a la planta baja, pero en este espacio ya se han tirado muros y se ha retirado parte del suelo para adecuarla a su nuevo uso, ya que ahí habrá tres salas de vistas y servicios comunes, la zona de detenidos y otras dependencias.

José Miguel Marín, administrador de la comunidad de propietarios, explicó que en febrero de 2015 la comunidad de propietarios interpuso un procedimiento judicial en contra de la obra que se estaba llevando a cabo para adecuar los bajos del edificio a las nueva sede de los juzgados porque los trabajos afectaban a elementos comunes del edifico, como bajantes, partes interiores o forjados. Ante esta denuncia se decretó la suspensión cautelar de la obra, pero se levantó poco después. En el juicio el magistrado no le dio la razón a los vecinos y continuaron las obras.

En diciembre de 2015 la comunidad de propietarios interpuso un recurso de apelación contra la sentencia de primera instancia hasta que la Audiencia Provincial dictó un fallo, emitido el martes, por el que le da la razón a los vecinos en todos los extremos de la demanda inicial y suspende, de nuevo, de forma cautelar la ejecución de la obra.

El representante de la comunidad vecinal explica que las obras han hecho mella en el edificio, ya que se han cerrado ojopatios, se han abierto agujeros en el forjado y hasta han tocado las vigas.

En los fundamentos de derecho la Audiencia Provincial afirma que está justificada la reclamación de la comunidad de propietarios, a la que da la razón en que la obra ha afectado a elementos comunes del edificio y señala que se han visto afectado los patios, que se no se puede alterar su estructura y tampoco la fachada de la entreplanta, basándose en la jurisprudencia del Tribunal Supremo.

La Audiencia Provincial también deja claro que no entiende que en primera instancia se condenara al pago de las costas a la comunidad de propietarios debido a las dudas que había en el procedimiento. En esta sentencia se condena al pago de las costas del procedimiento de primera instancia a la promotora de las obras.

Se trata de una sentencia firme en segunda instancia, aunque la promotora tiene 20 días para presentar recurso ante el Tribunal Supremo, aunque en este caso el proceso se alargaría años.

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