La Colonia (II)
siglo XX La mayor parte de los propietarios de viviendas eran extrajeros, sobre todo británicos, lo que explica la denominación de la nueva barriada

EN la Guía de Gibraltar y su Campo de Lutgardo López Zaragoza que data del año 1899, de las 54 calles de la Línea que se incluyen en su callejero, sólo dos de ellas están situadas en este barrio de La Colonia: Cachón y Escalereta. En cuanto a la primera pertenece desde muy antigua a La Colonia, en cambio no podemos decir lo mismo con la llamada calle Escalereta, ya que existió otro lugar en nuestra ciudad con este mismo nombre, por el Espigón de San Felipe.
Veintiséis años después, en 1925, y según refiere un plano de La Línea, ya son varios los nombres de callejones o calles situados en este sector de La Colonia, tales como del Horno, Del Llano, San Miguel, San José, Bañasco, Pizarra, Lima, Caldereta, Callejón de la Sangre, Del Calvo, Nueva, Callejón de La Colonia o Camino del Cachón (hoy llamada calle de El Greco). Como se podía apreciar, todos estos callejones de calzadas arenosas a los cuales no se le podía dar el calificativo de calles, sus nombre son más bien de origen popular que oficial, y así se mantuvieron inmutables hasta la década de la segunda República. En 1931 fueron cambiadas sus denominaciones en su totalidad, como ocurrió con muchas calles de todos los pueblos y ciudades de España.
De un Nomenclator de las calles de La Línea publicado en el año 1.938, donde se hacía constar los nombres que tenían en 1936 y los que luego, dos años mas tarde se le pusieron, las siguientes calles de esta barriada de La Colonia: Cardenal Cisneros (Anselmo Lorenzo), Diaz Delgado (Carlos Malato), Plaza del Padre Arnaiz (Plaza de Malatesta), Torres Quevedo (Flasmarion), Eduardo Dato (Fernández Pallares), Fernando Díaz de Mendoza (vulgarmente Callejón del Cura).
Hay asímismo otros nombres que no sufrieron alteración alguna y que actualmente tienen, Calle Zurbarán, Campoamor, Sarasate, Zorrilla, Saavedra Fajardo, Hilarión Eslava, Francisco de Vitoria y El Greco, nombres que son como una gran galería de hombres ilustres, entre los que se entremezclan nombres de grandes poetas, músicos, pintores, escritores, famosos inventores, astrónomos filósofos, destacados políticos e idealistas, ilustrísimos cardenales y venerables sacerdotes.
En los años 70 las calzadas de estas calles en su mayoría empedradas, no presentaban un estado de rodaje que invitaran a circular por ellas, ya que aún no habían conocido el procedimiento moderno del asfalto, conservaban todavía el firme de piedra salpicado de grandes baches, pero incluso las había peor, las que mantenían sus calzadas arenosas como en sus más primitivos tiempos, caminos polvorientos en el verano y enfangados en el invierno, presentando un panorama no muy estimulante al que se unían el otro espectáculo no menos deprimente de las viejas barracas.
Muchas de estas barracas ya abandonadas por sus habitantes que se fueron a vivir a nuevas viviendas, esperaban su derribo, otras que ya eran montones de latas retorcidas, maderas podridas por el tiempo, trozos de sacos y lienzos encalados que formaban los tabiques, restos de tejas, uralitas, muebles, cartones, trapos viejos y utensilios domésticos, formando amasijos de escombros en la vecindad en otras barracas que aun existían habitadas por modestas familias.
La Colonia, una barriada alegre y acogedoras sus gentes, contaba con modernos edificios que conviviann con los más viejos por la parte de la Avenida de España, con otros en el interior del barrio, destacándose el edificio de la Iglesia Parroquial del Sagrado Corazón de Jesús, de marcado estilo colonial y de gran belleza su interior. En fin son muchos los edificios antiguos dignos de destacarse.
Entre lo que no era más que un gran laberinto de callejones de trazados, caprichosos, bordeados de bajitas barracas construídas con maderas y hojas de latas sacadas de los envases de mercancías, que luego eran blanqueadas con muchas manos de cal, comenzaron a despuntar algún que otro edificio de mampostería casi todos ellos construidos por gentes de Gibraltar y otros forasteros, allá por el comienzo de los los años de 1900.
Aparte de las villas situadas frente al mar que se habían construido con los detalles más refinados algunos señores de Gibraltar, para pasar sus fines de semana [week end], cabe señalarse la casa llamada del Argentino, un edificio de una sola planta, en estado ruinoso al final de la calle Francisco de Vitoria, en su bifurcación con el antiguo camino del Cachón, hoy llamado calle El Greco. Éste podía ser el edificio de mampostería mas antiguo de La Colonia, justamente con las casas de Carlín, pero que al no tener sus fechas de construcción inscrita en sus fachadas, el orden de antigüedad se le puede adjudicar a Villa Alegre, que databa de 1904.
Villa Alegre es un edificio de planta baja de estilo colonial inglés, situado en la entrada de la calle Zurbarán dando vista a la carretera, este edificio más bien conocido por el chalet de Doña Dinora, reeunía cierta peculiaridad su edificación. Pues se atribuye su realización a un arquitecto inglés apellidado Smith, el cual haciendo honor al sentido robusto, práctico y seguro del sistema de construcción inglesa, reforzó los muros exteriores de su fachada con planchas de hierro.
Según contaban los vecinos más antiguos del barrio a Francisco Tornay, por qué, el constructor de Villa Alegre tomó tan tremendas medidas de seguridad, al edificar esta villa, tal vez creyendo que se encontraba en la India, Egipto o en el Sudán.
Resultaba que por aquellos años, en estas playas de Poniente, eran muy frecuentes los tiroteos de los carabineros y agentes del resguardo, contra los perros contrabandistas que cargados con mochilas de tabaco atadas a sus lomos, eran soltados en el agua, desde pequeñas barcas a corta distancia de la costa, y al amparo de la noche, pretendían, y lo conseguían muchas veces, pasar el contrabando a tierra burlando la vigilancia del fisco.
Así fue que por esa simple razón y no para protegerse del ataque de los filibusteros, el señor Smith, pretendió proteger a los habitantes de Villa Alegre de los fortuitos disparos que pudiesen penetrar en el interior de la vivienda.
Continuando con los edificios: Villa Lourdes, que se destaca por sus arcadas y altos muros, fue construida por los señores Multon y Ferrari de Gibraltar, propietarios de una gran cuadra de caballos puras sangre, que corrían en las competiciones hípicas que la Sociedad de Carreras de Caballos de Andalucía celebraba en el hipódromo de Campamento. En este chalet y se guardaba en potentes cajas de seguridad, las elevadas recaudaciones que se obtenían en el citado hipódromo los días de carreras.
En esta misma acera y junto al puente del Príncipe Alfonso, inaugurado juntamente con la carretera el 14 de Junio de 1916, se encontraban la acera de casas bajas, después patio de vecinos de Villa Riviere, antiguamente una gran finca de recreo que fuera propiedad de un italiano llamado Siñore José Riviere Enclive, villa que con su hermoso huerto y noria fue también propiedad de un súbdito alemán. Otro de los edificios pertenecientes a la vieja guardia, era el llamado Bungalow, edificio también de planta, baja y con reflejo de estilo colonial inglés, construído en 1904. Esta villa estaba situada antes de llegar a la calle Fernando Díaz de Mendoza Del Padre Greck y que debido a la popularidad de este cura de Gibraltar, se le puso a la calle Fernando Díaz de Mendoza el Callejón del Cura.
Como se puede apreciar, el nombre de La Colonia le caía muy bien a este barrio ya que una gran mayoría de propietarios de estas villas de recreo o eran súbditos británicos o de otras nacionalidades, y todo esto aun teniendo en cuenta que de muy antiguo existía una ley, por la que se prohibía las propiedades de terrenos o fincas a extranjeros en todo el Campo de Gibraltar, porque de no ser así ¿Hasta donde habrían llegado?. Entre los años 1904 y 1961 existían nada menos que 28 chalecito villas en esta acera de la Avenida de España comprendiendo la antigua numeración del 118 al 146.
Otras de estas villas que existían y algunas todavía existen son Villa Maitena, Víale, Sanguinetti, Pissani y la que fuera de don Luis Nile padre de la famosa artista compañera del gran actor cómico Miguel Ligero, Imperio Argentina.
Continua el Domingo que Viene……
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