"No me dejan disfrutar de lo que más me gusta, que es arbitrar"

"No me dejan disfrutar de lo que me gusta, que es arbitrar". Así se expresa el árbitro linense Jesús Tomillero, que tras hacer pública su homosexualidad recibió amenazas e insultos homófobos en un partido de cadetes disputado el pasado 26 de marzo se verá las caras con su agresor verbal este viernes en los juzgados de La Línea. En este periodo de tiempo Tomillero ha vivido en una montaña rusa de emociones. Las buenas, de parte de numerosos colectivos que le han brindado todo su apoyo, y las malas, en forma de amenazas de muerte, que llegan prácticamente a diario a través de las redes sociales.

El colegiado linense, que el viernes realizó las pruebas físicas para mantenerse como árbitro de Primera Andaluza senior, ha sido invitado por el Fútbol Club Barcelona al palco del Camp Nou el 29 de noviembre, cuando los azulgrana se miden con el Granada. "Es un detallazo del Barcelona, que es un club que me gusta como juega. Me llamaron personalmente del Barcelona y también el presidente para darme su apoyo. Me dijo que le gustaría que estuviera en el Camp Nou y que iban a hacer una campaña para que estas cosas no vuelvan a pasar y que me daba su apoyo tanto él como toda la plantilla", explicó Tomillero sobre uno de los numerosos apoyos que ha recibido en estos meses. Otro lo recogió este sábado en Córdoba, donde recibió uno de los reconocimientos de los II Premios LGTB Andalucía, en los que también fue premiado el linense Nacha la Macha, artista afincado en Madrid. "Somos dos linenses, que trabajamos por la igualdad en ámbitos distintos. Para mí es un honor que en Córdoba me den un premio, algo que aún no han hecho en La Línea", dijo contrariado.

La cara mala del deporte también ha servido a Tomillero para motivarse. Ha creado la asociación Roja Directa Andalucía LGTBI, cuyo objetivo principal es luchar contra la homofobia en el deporte. Su puesta de largo será el 28 de octubre y en el acto, que tendrá lugar en el Palacio de Congresos, y ya han confirmado su asistencia personas del ámbito deportivo y político. "Ya ha confirmado su asistencia Vicente del Bosque y estamos esperando un par de confirmaciones de futbolistas de Primera división y más clubes. Vendrá algún representante de la Junta de Andalucía; Antonio Sanz, delegado del Gobierno en Andalucía, y un representante de la Comunidad de Madrid... gente de muchos sitios".

El árbitro, no obstante, lamenta que no ha tenido más apoyo por parte del Ayuntamiento de su ciudad natal. "El Ayuntamiento me apoyó, pero todo se quedó ahí cuando denuncié los primeros insultos. No han dicho nada sobre las últimas amenazas de muerte. Otras ciudades y otros sitios sí se han preocupado".

Tomillero confiesa que tiene que lidiar día a día con amenazas de muerte. "Llegan día tras día. La Policía me ha dado un correo para que mande las denuncias, porque estaba 24 horas al día en la comisaría. No es normal esto. Vía Twitter llevo más de 1.100 amenazas, y al teléfono que tenía antes también me llamaban para amenazarme. Esto me afecta de forma brutal. Si le pasara a un político tendrá vigilancia policial, pero a mí me la han quitado. Me parece muy mal que estas cosas le pasen a un ciudadano y todavía no hagan nada. El miércoles recibí una llamada de Esther Capella, diputada de Esquerra Republicana, y me ha invitado al Parlament de Cataluña, desde donde van a tomar medidas. Están haciendo más cosas en otros sitios contra la homofobia que en mi comunidad autónoma. Es lamentable que la Junta de Andalucía aún no haya dicho nada al respecto. Me parece vergonzoso y anímicamente me afecta. Ya me ha recibido la presidenta de la Comunidad de Madrid y me van a recibir en Cataluña. Y aquí en Andalucía no han dicho nada. Esto es lamentable", afirma el colegiado, que también estuvo en el Parlamento Europeo, invitado por el PP, donde se comprometieron a estudiar una ley destinada a erradicar la homofobia del deporte.

Entre homenajes y amenazas Jesús Tomillero intenta hacer lo que más le gusta, arbitrar, aunque sigue recibiendo algún que otro insulto, según explica. "El sábado pasado pité en el campo del Atlético Zabal. Recibí un insulto homófobo por parte de una madre pero hice oídos sordos. Me dijo que me gustan mucho los pitos. Pero hice lo que a mí me gusta, que es arbitrar". El viernes también estuvo en El Puerto de Santa María para pasar unas pruebas físicas que le permitan continuar en Primera Andaluza sénior. "Fui con el animo bajo porque no tengo el apoyo que creo que debería tener. Desde la Federación Andaluza sólo me han llamado una vez por las amenazas de muerte, pero todavía no han hecho nada. Voy a darlo todo, a callar muchas bocas; soy gay pero me merezco estar en el sitio en el que estoy".

Además, Tomillero se enfrenta este viernes en los juzgados de La Línea a su primer agresor verbal, que tuvo lugar el pasado 26 de marzo en un partido de cadetes entre la Peña Madridista Linense y el Mirador de Algeciras. "Espero que la justicia me ampare, que tome cartas en el asunto y que este tipo de cosas no vuelvan a ocurrir. A este hombre lo he visto por la calle, ha agachado la cabeza y no es capaz de mirarme. Si me dice algo personalmente tampoco me sirve de mucho porque me humilló delante de muchas personas. A raíz de ahí comencé a recibir amenazas de muerte y me ha cambiado la vida de forma brutal", afirma.

Jesús Tomillero tiene más proyectos en mente. Uno es la publicación de un libro en el que contará sus vivencias, que aún está en proceso embrionario. El otro es la aparición en un programa deportivo, como colaborador habitual, en el que hará visible las demandas del colectivo LGTBI y luchará por la erradicación de la homofobia en el mundo del deporte.