La Línea apunta a los enganches ilegales en las tuberías como uno de los focos de las toallitas en las playas

La brigada de playas repasa la playa de Levante para retirar los residuos aparecidos el domingo

Galería: Las toallitas acumuladas en la playa de Levante de La Línea, en imágenes

Toallitas en la playa de Levante de La Línea, este lunes.
Toallitas en la playa de Levante de La Línea, este lunes. / Erasmo Fenoy

La Línea/La brigada de mantenimiento de las playas del Ayuntamiento de La Línea ha emprendido este lunes las tareas de limpieza del litoral de Levante, que amaneció la jornada del domingo lleno de toallitas y otros residuos tras el paso del temporal por la zona del Estrecho.

El concejal de Playas del Consistorio linense, Rafael León, ha subrayado este lunes que aunque se indagará en el origen de los residuos, una de las recurrentes causas que motivan la aparición de este tipo de suciedad en el litoral son los enganches ilegales de aguas residuales a la red de aguas pluviales. "Hay muchas incidencias por injerencias en la red, que suele ser una de las causas de este tipo de situaciones. El vertido no se ha producido como consecuencia de la rotura de ninguna tubería, porque de lo contrario la empresa Aqualia nos lo hubiera notificado", según León.

Aunque la vecina colonia de Gibraltar ha sido denunciada en múltiples ocasiones por los grupos ecologistas por el vertido de aguas residuales sin depurar desde Punta Europa, el edil ha sostenido que no se puede asegurar que en esta ocasión las toallitas procedan de la Roca. "En cualquier caso, como todos los días, desplegamos nuestras brigadas para la limpieza. Las toallitas serán recogidas con la máquina limpiaplayas", ha subrayado el edil.

El problema, lejos de ser puntual se está perpetuando, según denunciaron colectivos ecologistas y los propios vecinos de la zona de Levante. Además hay que tener en cuenta que la aparición de tal cantidad de toallitas tiene como resultado la presencia de quimicos en el litoral de La Línea.

Este tipo de hallazgos, además de evidenciar que en el mar hay muchas toallitas (ya de por sí son un serio problema medioambiental), también revela que no llegan solas, sino mezcladas con otros materiales procedentes de vertidos de aguas residuales, sobre los que se tendría que analizar su afección al ecosistema marino para comprobar el impacto real en el medio ambiente.

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