La nueva frontera inteligente sigue ocasionando esperas al sol en la Verja

La implantación del sistema ABC de fronteras inteligentes en la Verja de Gibraltar está causando estragos entre los que cada día deben cruzarla. Durante la mañana de ayer, las esperas de quienes accedieron a pie fue desmesurada, y para los que fueron en coche, kilométricas. Casi hasta Crinavis, según quienes las sufrieron, ya que se sumaron los coches con los vehículos pesados ante la imposibilidad de usar el recinto ferial.

El subdelegado del Gobierno en Cádiz, Javier de Torre, achacó "las colas que en los últimos días se han producido en la entrada y salida de Gibraltar, llegando hasta los 45 minutos de espera", a la necesidad de que los usuarios se acostumbren a su uso. El Gobierno de Gibraltar, por su parte, amplió la medición de la espera a dos horas.

La Asociación de Trabajadores Españoles en Gibraltar (Ascteg) criticó que se "confinara a una línea, a pleno sol infernal" a trabajadores, personas con equipajes para el aeropuerto, mayores y niños, que eran parados constante mente llegando a esperas de 45 minutos. Así, la organización indicó que está recopilando fotografías y testimonios para enviarlas al comisario europeo de Asuntos Internos y Ciudadanía, a parlamentarios europeos que inspeccionaron la frontera, al comité de Asuntos Exteriores del Parlamento Británicos y firmas al Congreso, a través del diputado del PSOE Salvador de la Encina.

El Gobierno de Gibraltar, por su parte, contó que los trabajadores y visitantes que se dirigían durante la mañana de ayer a Gibraltar tuvieron que esperar hasta más de dos horas para cruzar la frontera. Indicó que las colas de vehículos llegaron a superar los dos kilómetros de longitud, provocando el colapso de la arteria principal de La Línea. Criticó también que a pesar de tratarse de horas punta de tráfico, solo había un carril habilitado para entrar a Gibraltar de los dos carriles existentes para acceder al Peñón.

El Gobierno de la colonia británica difundió además el modo en que presentar su reclamación por haber tenido que soportar una larga espera a temperaturas superiores a los 30 grados para poder acceder a Gibraltar. En otras ocasiones, sobre todo desde la puesta en marcha de la frontera inteligente el jueves pasado, la espera también ha sido para salir.

El subdelegado del Gobierno, Javier de Torre, indicó ayer que la frontera se ha dotado de mayor personal humano con la misión de informar a los ciudadanos de las peculiaridades del nuevo sistema, "que también está instalado en el puerto de Algeciras y funciona con normalidad".

En el caso de La Línea, se trata de "trece dispositivos de entrada y trece de salida, y el usuario debe familiarizarse con este sistema para ganar la agilidad que se persigue, por lo que se va a reforzar el personal que va a informar al usuario para usarlo correctamente y en el menor tiempo posible".

"Estoy convencido de que con la experiencia y el aprendizaje de estos primeros días, la situación será más ágil y fluida una vez que todos se familiaricen en su uso, contando entretanto con la ayuda de los cuerpos de seguridad del Estado para explicar las dudas y solucionar los problemas que surjan en el día a día", dijo De Torre.