Un militante del PSOE de Córdoba, implicado en la compra del chalé de Ábalos en La Línea

La Línea/La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil relaciona a un militante del PSOE de Córdoba, Cristian Corvillo, en la compra de un chalet en la urbanización Alcaidesa, en La Línea de la Concepción, del que pudo "disponer" el exministro José Luis Ábalos presuntamente con la trama de hidrocarburos que habría servido como presunto soborno. Según los agentes, Corvillo estaría muy próximo al empresario Víctor de Aldama, el exasesor del exministro Koldo García y del propio Ábalos.

Según el informe de la UCO, Aldama, quien fue el "verdadero responsable y organizador de la compra del inmueble", maniobró "a través de terceras personas que negociarían las condiciones de compra, el pago de la señal o la firma del contrato de arras".  "Aquellos pormenores que podrían resultar del interés de Ábalos, como el destino a dar al mobiliario existente en la casa, Aldama se los comunicaba a Koldo, quien hacía llegar la respuesta del exministro nuevamente a Aldama", explica la UCO.

En un inicio, Aldama le manifestó a Corvillo que la compra de la casa la realizaría "un tal Henrique", un ciudadano venezolano "vinculado a Suelopetrol". Éste llegó a firmar un contrato de arras, pero Aldama decidió prescindir de él. Fue en ese punto cuando el empresario pidió a Corvillo que contactase con Claudio Rivas, su socio, y que estaba "vinculado a Villafuel", señala la UCO.

Las indagaciones de los agentes revelan que el chalet de La Alcaidesa supuestamente usado por Ábalos fue pagado en gran parte por la mercantil Have Got Time. La titular de esa empresa, señalan, es la hija de Carmen Pano, una de las personas que acudió al encuentro con el director de Gabinete de Industria. La Guardia Civil constata que, pese a ello, esa compañía "es controlada de manera real" por Claudio Rivas, el socio de Aldama. "Consumada la compra del inmueble por parte de Aldama, existen múltiples evidencias que confirmarían el uso real del mismo por parte de Ábalos", destaca.

 Unos meses después de que Ábalos dejase el Ministerio de Transportes, esa empresa remitió un burofax al exministro en el que le reclamaba el pago de cuatro mensualidades del chalet. Koldo contactó con Aldama para pedirle explicaciones por esa comunicación. "Esto ya es la hostia", se quejó el exasesor. "Ni te preocupes, acuérdate que te dije que eso llegaría, se tiene que cubrir pero es solo por eso nada más, tranquilo", zanjó el empresario.