Patricia Blázquez, maestra del colegio Santiago de La Línea, entre los 10 nominados a Mejor Docente de España 2024

La Línea/Patricia Blázquez Prieto, maestra de Educación Infantil del colegio Santiago de La Línea, ha sido incluida entre los 10 nominados a Mejor Docente de España 2024 en los Premios Educa Abanca, conocidos como los Goya de la educación. Para optar a estos galardones, son las familias y los propios alumnos los que proponen a los docentes y posteriormente el Comité de Baremación de Méritos selecciona a 10 finalistas en cada una de las seis categorías establecidas.

Los premios se entregarán el 15 de marzo de 2025 en A Coruña, donde de forma paralela también se celebrará el Congreso Mundial de Educación EDUCA 2025. En esta gala se darán a conocer las puntuaciones obtenidas por cada uno de los finalistas. Los ganadores obtendrán una estatuilla, además de un premio económico de 1.000 euros y un diploma acreditativo. Los restantes nueve finalistas obtendrán una estatuilla y un diploma acreditativo.

Patricia Blázquez Prieto (@revolu_patri), nacida en Málaga pero con media vida en La Línea, donde estudió Magisterio, ha sido nominada gracias al cariño y reconocimiento de sus alumnos y sus familias, quienes valoran no solo su labor pedagógica, sino también su humanidad y cercanía desde que comenzó en la pública en el año 2008. Para Patricia, la enseñanza va mucho más allá de los contenidos curriculares: se trata de construir un espacio donde los pequeños puedan sentirse seguros, escuchados y motivados para explorar el mundo que les rodea. Actualmente, acompaña a un grupo de 25 niños y niñas de 5 años, a quienes ha guiado desde que tenían 3, durante todo el ciclo de Infantil. 

La maestra, junto a sus compañeros de claustro, reivindica una educación que valore la diversidad en todos los aspectos, incluyendo algo que muchas veces pasa desapercibido en el ámbito escolar: el tiempo. En su opinión, en una sociedad que se mueve siempre al ritmo frenético de la inmediatez, ellos ofrecen un espacio educativo que fomenta un tiempo pausado que permite dedicar la atención necesaria a las cosas verdaderamente importantes. "En esta sociedad tan rápida, tan de vértigo, lo que promovemos es lo contrario", explica Patricia, resaltando cómo en el CEIP Santiago se le da prioridad a detenerse cuando surge un problema o un conflicto en clase.