Acerinox y el comité de huelga acuerdan un calendario para negociar el convenio a partir del 21 de marzo
Conflicto laboral
La empresa desiste de las demandas por huelga abusiva y la parte social confirma que ha solicitado la suspensión de las demandas por vulneración de derecho de huelga
Los trabajadores mantienen la concentración prevista el día 18 en la sede de la compañía en Madrid
La plantilla de Acerinox buscará en Sevilla "un calendario de negociación" que acerque el fin de la huelga
Los Barrios/La dirección de Acerinox Europa y el comité de huelga han acordado este viernes en una reunión mediada por el Consejo Andaluz de Relaciones Laborales (CARL) un calendario de reuniones para negociar el cuarto convenio colectivo, cuyo atasco ha provocado una huelga indefinida que este viernes ha cumplido 40 días. La primera reunión tendrá lugar el 21 de marzo en Jerez y el 27 de marzo en Sevilla.
A pesar de este acuerdo para sentarse a negociar, los representantes de los trabajadores mantienen la concentración convocada el próximo lunes, 18 de marzo, a las puertas de la sede de la compañía en Madrid. "La planteamos antes de que se convocara esta reunión en el CARL y la empresa ha preferido que comencemos a la vuelta de la concentración", indicó las tras reunión el presidente del comité de huelga, José Antonio Gómez Valencia. "Ya estamos en negociación, que es lo que pretendíamos", destacó tras la cita en Sevilla.
El primer punto de acercamiento entre ambas partes después de estos 40 días se ha visto plasmado cuando la empresa ha comunicado que ha desistido de las demandas por huelga abusiva y ha procedido a suspender la demanda de huelga ilegal, ambas con anterioridad a la celebración de dicha reunión en cumplimento del punto 5 de la propuesta que ambas partes acordaron. Además, la parte social ha confirmado que se ha solicitado la suspensión de las demandas de tutela de derechos fundamentales por vulneración del derecho de huelga, establecido en el punto 6.
La propuesta cuenta con el añadido de un punto octavo que fue aceptado por las dos partes, que indica que ambas "se reservan el derecho de iniciar todas aquellas acciones que considere necesarias para no perder los derechos que le asisten en defensa de sus intereses; ahora bien, con el fin de preservar la negociación se comprometen a dejar en suspenso su ejecución mientras dure el proceso de negociación".
El documento firmado por los asistentes a la reunión recoge que el desarrollo del proceso de negociación se llevará a cabo "en un primer tramo temporal de desescalada y desbloqueo" con la reunión llevada a cabo este viernes bajo la dirección del CARL, "sin perjuicio de que las partes añadan más días de negociación".
La propuesta contempla que el desarrollo de la negociación no afectará a la huelga convocada. También señala el reconocimiento por parte de la empresa de la actual composición del comité de huelga, uno de los puntos principales del bloqueo de la situación por parte de la empresa, aunque "adoptando sus decisiones sobre la negociación del convenio de conformidad con la representatividad de la comisión negociadora para su validez y legalidad, según los artículos 87 y 88 del Estatuto de los Trabajadores y sin perjuicio del sometimiento a la asamblea de trabajadores de las decisiones que se adopten".
Otro punto recoge que el comité de huelga seguirá ejerciendo sus funciones legales en relación con la huelga, y el séptimo contempla que "el CARL requiere y las partes aceptan la necesidad del desarrollo del proceso de negociación descrito sin medidas de presión para el desarrollo normalizado de las citadas reuniones con la debida seguridad para las personas e instalaciones que participen o se empleen".
Los puntos de discordia
Los trabajadores de la factoría de Acerinox Europa consideran que la propuesta de la empresa para el cuarto convenio colectivo de la planta de Palmones supone un retroceso en derechos laborales, un empeoramiento de sus opciones para conciliar la vida laboral y familiar y una revisión salarial que no crecerá conforme al incremento del coste de la vida.
La empresa considera necesario aplicar medidas de flexibilidad y disponibilidad laboral para recuperar la viabilidad económica de la factoría, con pérdidas en cuatro de los últimos cinco años.
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