Muere el cura Salvador, histórico párroco de Palmones e Hijo Adoptivo de Los Barrios

Afincado en la aldea marinera desde 1970, el religioso de Ubrique se ganó el cariño del pueblo durante más de 40 años al frente de la Pura y Limpia

El cura Salvador, en la inauguración de la capilla de La Montera, en Los Barrios.
El cura Salvador, en la inauguración de la capilla de La Montera, en Los Barrios. / Martín

El municipio de Los Barrios está de luto por el fallecimiento de Salvador García Téllez, muy querido y respetado párroco de la Pura y Limpia de Palmones durante más de 40 años. El cura Salvador, como se le conocía cariñosamente, ha fallecido a los 84 años en el hospital Punta de Europa de Algeciras, donde estuvo ingresado en los últimos días aquejado por varios achaques propios de su avanzada edad.

Los Barrios llora a un Hijo Adoptivo de la Villa, reconocimiento que el cura Salvador recibió en 2001, al mismo tiempo que la Congregación de las Hijas de la Caridad recibieron la Medalla de la Villa por sus respectivas labores sociales durante décadas.

Salvador García Téllez, que nació en Ubrique el 15 de agosto de 1940, llegó a Palmones en el año 1970 y desde entonces permaneció en esta población desarrollando una meritoria actividad parroquial y humana que le ha merecido el respeto, cariño y aprecio, no sólo de sus feligreses de Palmones, Los Cortijillos, Guadacorte y Ciudad Jardín, sino también de muchos otros vecinos de Los Barrios y los municipios hermanos del Campo de Gibraltar.

Salvador se mantuvo al frente de la parroquia de Palmones durante casi medio siglo hasta que hace unos diez años cedió el testigo por motivos de salud. El párroco pasó sus últimos años en una residencia junto a su hermana.

Salvador García, arropado por su familia.
Salvador García, arropado por su familia.

La reforma y ampliación de la pequeña capilla que Salvador García Téllez se encontró en Palmones a su llegada, para convertirla en un templo parroquial adecuado a las necesidades de los habitantes de esta aldea marinera devota de su patrona, la Virgen del Carmen, fue una de las primeras tareas en las que este hombre afable volcó todas sus energías. Pero este sacerdote dedicó, además, sus esfuerzos en aquellos años duros de la década de los 70 a contribuir en la mejora de la calidad de vida de los palmoneños y propició con entusiasmo una gran labor social. A él se debió que las monjas de la Orden de las Hijas de la Caridad continuasen en Palmones y la creación de la escuela de educación infantil. También fue decisiva su intervención para lograr de las autoridades competentes de la época la construcción de lo que hoy es el colegio público Nuestra Señora de Guadalupe. Su constancia posibilitó el impulso de la parroquia de Los Cortijillos.

El cura Salvador se mostró siempre implicado en la lucha social de los diferentes núcleos poblacionales de Los Barrios.

El cura Salvador, durante una celebración del Carmen en Palmones.
El cura Salvador, durante una celebración del Carmen en Palmones.
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