Magnon Green Energy: cómo generar energía renovable gracias al cuidado de los campos andaluces

España es el segundo país de Europa en superficie agrícola y el tercero en superficie forestal. La biomasa, es decir, los restos agroforestales de nuestros campos y montes, muchas veces abandonada, puede tener una segunda vida: una energía renovable, estable y gestionable que ayude a nuestro sistema energético a alcanzar los objetivos de descarbonización marcados por la Unión Europea.

Según cálculos de las asociaciones del sector, el potencial andaluz para generar electricidad con biomasa es el mayor del país, con 2,7 GWt, a partir de recursos biomásicos excedentarios que, hoy por hoy, no se están aprovechando. La comunidad andaluza se encuentra, por tanto, en una posición privilegiada para impulsar el desarrollo de una energía renovable que presenta un balance económico positivo por los beneficios sociales y ambientales que genera.

Empresas como Magnon Green Energy llevan años generando energía renovable a partir de biomasa. La filial energética del grupo Ence es pionera en el aprovechamiento sostenible de la biomasa como fuente renovable de energía. Su apuesta no es otra que la de poner al servicio de la sociedad las múltiples ventajas de esta fuente de energía renovable, que destaca como una de la grandes alternativas a los combustibles fósiles.

Con el objetivo de un sistema eléctrico libre de emisiones y que beba de energías renovables y respetuosas con su entorno, España trabaja en el desarrollo de tecnologías como la fotovoltaica o la eólica, que son capaces de producir grandes cantidades de energía utilizando recursos en los que nuestro país posee una gran riqueza.

Sin embargo, este tipo de energía supone una dependencia de las condiciones meteorológicas, lo que provoca la imposibilidad de gestionar su producción y lleva al sistema eléctrico a utilizar otras tecnologías – no renovables – para cubrir el consumo en los momentos en los que no se dan las circunstancias de las que dependen (sol, viento).

Aquí es donde entra en juego la biomasa, la única renovable gestionable. Esta tecnología permite dar estabilidad a los precios del sistema eléctrico y se ha convertido en una pieza clave para alcanzar la – tan deseada – independencia energética. La producción con biomasa puede ser planificada en el corto, el medio y el largo plazo, y es capaz de adaptarse en tiempo real a las necesidades del sistema eléctrico.

No obstante, la gestionabilidad no es el único aspecto en el que destaca la biomasa. Su impulso de la economía y del medio rural la convierten en la mejor aliada en la lucha contra la llamada “España Vaciada” y el impulso de la descentralización de la economía y la industria.

Gracias a una planta de generación de biomasa, se consigue reactivar la economía del campo, proporcionando un alto valor socioeconómico. Con esta actividad, se contribuye de forma directa a la vertebración del territorio y a la fijación de la población en zonas rurales. Las cifras hablan por sí solas: es la renovable que más empleo genera. Así, las cinco plantas que Magnon tiene localizadas en Andalucía - tres en Huelva, una en Córdoba (Lucena) y otra en Jaén (Villanueva del Arzobispo) - aportan a la comunidad autónoma 4.500 empleos. Empleo sostenible y de calidad, en el que industria y agricultura se dan la mano.

El uso de la biomasa para generar energía también juega un importante papel en el cuidado del medioambiente, ya que se traduce en el cuidado y limpieza de los montes y, una adecuada gestión forestal, deriva en la reducción del riesgo de incendios en hasta un 70%, ya que el aprovechamiento sostenible de los restos vegetales, que son retirados y gestionados, evita la acumulación de material combustible en zonas de riesgo. Pero el valor de una gestión sostenible no solo radica en los montes: con la valorización de los restos agrícolas se evita su quema descontrolada y contaminante en nuestros campos, eliminando así emisiones difusas y, además, es una excelente manera de prevenir plagas de manera natural en los cultivos.

Magnon persigue colaborar en descarbonizar el sistema eléctrico, procurando así una transición energética justa, y creando un futuro sostenible para el planeta. Y su apuesta por el desarrollo de las energías renovables va más allá.

La hoja de ruta de Magnon incluye el crecimiento y la diversificación hacia nuevos campos, vinculados a la descarbonización de la industria. La amplia experiencia de Magnon en el sector de la biomasa y su apuesta por la innovación, le han llevado a crear un ambicioso porfolio de servicios en torno a las energías renovables, que busca generar impacto positivo sobre nuestro entorno más cercano y sobre el planeta.

En el marco del cambio de modelo energético hacia un sistema descarbonizado y renovable, Magnon ofrece soluciones, productos y servicios energéticos sostenibles a través de las tecnologías más punteras, con la biomasa como eje central.

Asimismo, la compañía sigue avanzando con ambiciosos objetivos para generar valor también con la tecnología fotovoltaica, con la que está impulsando nuevos proyectos en Andalucía que ahora están en los primeros pasos de su desarrollo.