El Mercedes-AMG GT Coupé de los clientes más exigentes: el 63 Pro 4Matic+
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El Mercedes-AMG GT Coupé que estaba a la venta con las versiones 43 y 55 o 63 4Matic+, añade ahora una derivada de esta última a su gama. Se trata de la Pro que eleva la potencia de su motor V8 con dos turbocompresores y 4 litros de los 585 a los 612 CV, además de mejorar su aerodinámica y refrigeración de cara al uso en circuito.
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El GT Coupé de Mercedes-AMG incorpora una versión derivada de la más potente con la que contaba hasta ahora: la 63 4Matic+. Con el apellido Pro se distingue esta variante cargada de radicalidad y que está específicamente destinada a los conductores que utilizan los circuitos de forma ocasional.
Con respecto a la versión de la que deriva, la GT 63 Pro 4Matic+ recurre a un motor V8 de 4 litros sin electrificación y potenciado que suma 27 CV. Así alcanza los 612 CV, mientras que el par máximo crece en 50 Nm hasta situarse en 850. El cambio se produce en la unidad de control del motor, mientras que este coupé 2+2 mantiene el cambio automático de nueve velocidades y la tracción total.
Así, el GT 63 Pro 4Matic+ acelera de 0 a 100 km/h en 3,2 s y hasta los 200 km/h en 10,9 segundos, es decir, gana medio segundo respecto al GT 63 4Matic+, y aumenta su velocidad de los 315 a 317 km/h.
Otros cambios incumben al reforzado de los circuitos de refrigeración del motor, con la utilización de dos radiadores en ambos pasos de rueda. Asimismo, los radiadores de los diferenciales y la caja de transferencia del sistema de tracción tiene sus propia refrigeración con la ayuda de bombas de agua que colaboran a la disipación del calor a través de los radiadores superiores.
Se han revisado, asimismo, la geometría de los alabes de dirección del aire o las placas de protección de los frenos, para que canalicen mayor caudal de aire, de cara a aumentar su durabilidad y resistencia.
En la pelea contra el aire, el GT 63 Pro 4Matic+ también mejora. Así, el faldón delantero ha sido rediseñado y es ahora más grande, se integran deflectores de aire adicionales hechos en fibra de carbono, aparece un perfil aerodinámico activo en los bajos, un control de entrada de aire en el faldón delantero o un alerón fijo en el portón.
Las mejoras aerodinámicas llevan a que la elevación del eje delantero se reduzca en más de 30 kilos, lo que debe suponer una mayor precisión en el comportamiento a alta velocidad. En cuanto a los deflectores adicionales en los bajos, al estilo del Mercedes-AMG One, que se encuentran a la altura de ambos ejes y aceleran el flujo del aire, deben ayudar a aumentar la carga en el eje trasero, junto al mencionado alerón, en unos 15 kilos.
Adicionalmente, esta versión cuenta con un sistema de frenos cerámicos, que es de serie, con pinzas fijas de seis pistones delante y pinzas flotantes de uno detrás, con un disco de 420 milímetros en el eje delantero: son los mayor tamaño que Mercedes-AMG ofrece de serie en la actualidad y la parte posterior de los discos está hecha de titanio ligero. Esta composición reduce el peso de las masas no suspendidas, además de mejorar su durabilidad y su resistencia al trabajo intenso.
Las llantas son de aluminio forjado de 21" con radios cruzados y pintadas exclusivamente en gris Himalaya mate. Están equipadas con neumáticos Michelin Pilot Sport 5, si bien los Michelin Pilot Sport Cup 2R Cup están disponibles opcioinalmente sin sobreprecio. Sus dimensiones son 295/30 ZR 21 y 305/30 ZR 21, delante y detrás, respectivamente.
El Mercedes-AMG GT 63 4Matic+ tiene un precio de 220.416 euros que esta versión Pro podría superar, aproximadamente, en unos 60.000 euros.
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