El Ejército israelí admite errores en la muerte de 15 paramédicos en Rafah

Oriente Próximo

La investigación, que señala “malentendidos operativos”, implica la destitución de un oficial judío

Ataques de Israel causan más de 40 muertos en Gaza

Varios miembros de la Media Luna Roja asisten a un funeral en Deir al Balah.
Varios miembros de la Media Luna Roja asisten a un funeral en Deir al Balah. / EP

Jerusalén · Tel Aviv/El Ejército israelí reconoció “malentendidos operativos” y “errores” en la muerte por fuego israelí de 15 paramédicos, rescatistas y personal de la ONU en Gaza el pasado 23 de marzo, afirmando que la “mala visibilidad” llevó al subcomandante de una brigada a no reconocer a las ambulancias en que viajaban, por lo que anunció la destitución de dicho oficial y una amonestación a su superior.

En un resumen de la investigación castrense de lo ocurrido ese día en la localidad sureña de Rafah, cuyas conclusiones se remitirán a la Fiscalía israelí, se explica que hubo varios tiroteos israelíes contra el convoy de ambulancias, el coche de bomberos y el vehículo de la ONU que fueron atacados, en los que viajaban miembros de la Media Luna Roja y de Defensa Civil de Gaza, entre los que el Ejército insiste en que había seis milicianos de Hamas.

El informe detalla que se produjo un primer tiroteo “contra vehículos de Hamas” y un segundo –una hora después– contra ambulancias y un coche de bomberos que se dirigieron al lugar, al evaluar el subcomandante que estos vehículos también eran de Hamas, lo que le causó una “sensación de amenaza” y ordenó abrir fuego.

“Las tropas abrieron fuego contra sospechosos que salían de un camión de bomberos y ambulancias muy cerca de la zona donde operaban, tras percibir una amenaza inmediata y tangible. El personal de vigilancia informó de que cinco vehículos se acercaban rápidamente y se detenían cerca de las tropas, de los cuales los pasajeros descendían rápidamente”, dice el informe sobre el convoy sanitario.

El subcomandante, explica, evaluó que los vehículos –correctamente señalizados con luces de emergencia– pertenecían a Hamas y acudían a socorrer a sus compañeros. “Ante esta impresión y sensación de amenaza, ordenó abrir fuego”, dice, y achaca a la “mala visibilidad nocturna” el que no reconociera los vehículos como ambulancias. “Sólo más tarde, tras acercarse a ellos y examinarlos, se descubrió que se trataba de equipos de rescate”, dice el informe.

Un tercer ataque tuvo lugar 15 minutos después, cuando llegó un vehículo de la ONU que fue también tiroteado, debido según el informe a “errores operativos que incumplían las normas”. Uno de los muertos ese día era un miembro de la ONU.

“La investigación determinó que el fuego en los dos primeros incidentes se debió a un malentendido operativo por parte de las tropas, que creían que se enfrentaban a una amenaza tangible de las fuerzas enemigas. El tercer incidente implicó una infracción de las órdenes durante un combate”.

Hasta una semana después, los cadáveres no pudieron ser rescatados del lugar por los organismos afectados, que se los encontraron enterrados en arena y junto a los vehículos destruidos.

Al respecto, el informe indica que, al amanecer del día siguiente al ataque, “se decidió recoger y cubrir los cadáveres para evitar más daños y despejar los vehículos de la ruta en preparación para la evacuación de civiles”, así como triturar sus vehículos, y concluye que esto último fue un error.

"Informe incompleto"

“La investigación concluyó que la retirada de los cadáveres fue razonable dadas las circunstancias, pero la decisión de triturar los vehículos fue errónea”, dice el informe, que niega que se tratara de ocultar el suceso, que se tratara de una ejecución y que los cuerpos estuvieran maniatados.

Ante estas conclusiones, el Ejército ha decidido destituir al subcomandante de la Brigada 14 del Batallón de Reconocimiento Golani, “debido a sus responsabilidades como comandante de campo en este incidente y por proporcionar un informe incompleto e inexacto durante la sesión informativa”.

El informe no explica en qué consiste este informe “incompleto”, pero un portavoz castrense reconoció días después que los militares en el terreno dieron una información errónea en un principio al afirmar que los vehículos no llevaban las luces de emergencias encendidas, lo que resultó desmentido en un vídeo grabado por un paramédico antes de morir.

Por su parte, el general de división (reservista) Yoav Har Even, a cargo de la investigación, atribuyó este domingo, en un encuentro con la prensa internacional, al “estado mental” de las tropas esos tres ataques.

“Se halló que, dada la realidad personal de las fuerzas: tiempo de guerra, ambiente hostil (...), actuaron bajo la fuerte impresión de que estaban ante una amenaza inmediata”, alegó Har Even durante una sesión en la que las menciones al entorno y al estado mental en el que se encontraban los militares precedió a la mayoría de detalles sobre los tiroteos.

stats