La Guardia Civil de Cádiz frustra hasta tres intentos de introducir gasolina para narcolanchas esta madrugada

Una de las lanchas cargadas con bidones de gasolina.
Una de las lanchas cargadas con bidones de gasolina. / G.C.

La Guardia Civil ha frustrado esta pasada madrugada tres intentos de introducción de petacas de gasolina por la costa gaditana, en Chipiona, en Conil y en Barbate. Las tres embarcaciones serían utilizadas para surtir a las narcolanchas de las redes que actúan en la zona.

Según ha informado el Instituto Armado, el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) de la Guardia Civil detectó en primer lugar una lancha semirrígida de 14 metros de eslora, con 4 motores Yamaha de 300CV cada uno, cargada de petacas de gasolina. Sus tripulantes, tras verse acorralados por la embarcación Río Iro del Servicoio Marítimo de la Benemérita, huyeron a tierra abandonando la embarcación con 160 garrafas repletas de gasoilina en su interior.

En segundo lugar se aprehendieron otras 15 garrafas de gasolina que la patrulla de Seguridad Ciudadana de Conil localizó en la playa del Frailecillo, en el Cabo de Roche. Los agentes identificaron a dos personas, ocultando las petacas en el lugar. Se instruirán diligencias para la investigación de ambos.

El SIVE detectó la presencia de una segunda embarcación, esta vez en la Playa del Botero, en Barbate. Personada la patrulla de Seguridad Ciudadana con apoyo de Policía Local de la localidad, se encontró el rastro de una embarcación cuyos tripulantes, posiblemente por la presencia policial, se vieron obligados a abortar un delito de contrabando de petacas de gasolina, transportando por tierra una embarcación de 5 metros de eslora hasta una finca aledaña a la línea de playa. La Guardia Civil continúan con las investigaciones.

Asesinato en Trebujena

Estas actuaciones coinciden con el hallazgo, este sábado, de un cadáver en el río Guadalquivir. Se trataba de un varón de 62 años, natural de Sevilla, y cuyo cadáver apareció en el río, a la altura de Trebujena, cargado con una mochila llena de ladrillos y atada con una cadena al cuello.

Una patrullera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, que patrullaba por la zona, fue alertada de la aparición del cuerpo y se desplazó hasta la zona para hacerse cargo del mismo. La Benemérita ha abierto una investigación, pero parece claro que se trata de un ajuste de cuentas relacionado con el narcotráfico.

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