Carlos Saura lleva a París su pasión por el flamenco y el cine

La pasión creativa del director de cine español Carlos Saura resurge intacta en su última película musical, Flamenco Flamenco, presentada ayer en París, una luminosa muestra de los mejores cantaores, bailarines y guitarristas actuales.

"Cada cantaor es un Pavarotti a su manera, cada bailarina es única, la mejor. Estoy satisfecho de contribuir a extender el conocimiento del flamenco", declaró el cineasta, nacido en 1932 en Huesca.

"Soy amante del flamenco desde que era niño; durante la guerra civil y en la posguerra los soldados y milicianos cantaban flamenco por las calles, y también los obreros de la construcción. Es una música que siempre me ha fascinado", añadió.

En Flamenco Flamenco actúan entre otros Estrella Morente, Eva la Yerbabuena, Paco de Lucía, Farruquito, José Mercé, Arcángel, Manolo Sanlúcar. "Los gitanos han colaborado con la creación del flamenco, pero no lo han inventado, tiene sus raíces en Pakistán; los gitanos son nómadas, yo los veía en mi infancia con sus carromatos, en esa época no se les veía bailar flamenco".

"Bailar y cantar es para ellos una forma de sobrevivir, aunque no todos los gitanos bailan o cantan... cuando estaba elaborando el casting para El amor brujo, necesitaba muchos gitanos, me di cuenta que la mayoría no sabía cantar ni bailar", dijo.

Saura, quien ha realizado numerosos filmes sobre obras y autores musicales, entre ellos Carmen (1983), Tango (1998), Goya en Burdeos (1999) y Fados (2007), explicó que en su familia no había tradición flamenca, "mi madre era pianista clásica, interpretaba a Debussy, a Ravel". El cineasta está preparando ahora su próxima película, Guernica, sobre los 33 días en que Picasso pintó ese cuadro, en 1937.