'Gernika', con los algecireños Carlos y Víctor Clavijo, llega a Odeón

La asociación cultural Artis 7 celebrará hoy el 80 aniversario de la Guerra Civil Española participando en el estreno del largometraje Gernika en las instalaciones de Odeón Multicines, en Palmones. Se trata de una producción dirigida por Koldo Serra que cuenta con la participación de los hermanos algecireños Víctor y Carlos Clavijo, el primero como actor y el segundo como guionista y productor.

El colectivo aprovecha la llegada a las pantallas de la película para celebrar sus cinco años de existencia y "apuesta por el cine español y campogibraltareño y qué mejor que hacerlo con un estreno por todo lo alto y en colaboración con Multicines Odeón".

Gernika es la obra soñada por su director, el vasco Koldo Serra, que ha tardado cuatro años en llevarla a cabo.

Con un presupuesto de seis millones de euros y un reparto internacional que cuenta, entre otros, con María Valverde, James D'Arcy, Jack Davenport, Burn Gorman, Irene Escolar e Ingrid García Jonsson, el largometraje recoge un episodio luctuoso de la historia de España, el bombardeo de la población de Gernika el 26 de abril de 1937, a través de una historia de amor.

Presentada en el último Festival Español de Málaga, la producción de Serra es una de las apuestas más destacadas del cine español en este año y ha sido bien tratada por la crítica.

La actividad consistirá en una presentación previa y la proyección de la película, sin descartar algunas sorpresas.

Cuando se estrenó en Málaga, el guionista algecireño confesaba que "nos documentamos mucho y cuando tocas este tema te entran bastantes dudas, pero realmente lo que queríamos era hacer una película muy humanista y contar cómo la gente intenta hacer su vida de forma normal a pesar de las circunstancias".

Rodada en inglés, aunque también se habla euskera, castellano y alemán, la cinta no pretende tomar una posición política, ni retratar un sólo bando, según explicó el equipo.

Los efectos digitales, la ambientación, el diseño de arte y el vestuario van introduciendo al espectador en un relato que va creciendo en tensión hasta su punto álgido en los veinte minutos finales, que son los dedicados al bombardeo.