'Mi abuelo tenía un hotel': ¡Cómo nos divierten nuestros abuelos!

Mi abuelo tenía un hotel es una divertida novela de Daniel Nesquens con la que disfrutarán todos esos nietos que admiran a sus abuelos. Los abuelos enseñan que los sueños, si trabajas en ellos, se cumplen.

La abuela es la bellísima Eloísa, actriz, de la que se enamoró el abuelo cuando era un joven ascensorista. Y de este amor nacieron muchas cosas: las deliciosas tartas de manzanas Gaumon, el padre del narrador que es el nieto de esta historia y también el hotel. Hotel pequeño, con dos plantas y cinco habitaciones en cada una de ellas. Sin servicio de habitaciones, sin comidas, sin caja registradora, por supuesto sin ascensor ni ascensorista. El abuelo es paciente, amable, trabajador, tiene corazón de poeta.

En cada capítulo tenemos un personaje a cuál más extraño y divertido. Todos igual de importantes porque todos somos iguales.

En sus páginas nos demuestra que un edificio puede ser frío y oscuro, pero convertirse en un lugar acogedor cuando ponemos todo el corazón, cuando tratamos a las personas con cariño, con comprensión, acogiéndolos tal y como son. Son ciento cuatro páginas muy ágiles de leer e ilustradas por Bea Enriquez.

Lectura para nietos y abuelos, para crear conversación sobre su juventud, los sueños que han tenido y los personajes curiosos con los que se han encontrado en la vida. Este libro es una buena excusa para un diálogo intergeneracional.

Daniel Nesquens tiene publicado casi cincuenta libros. Diecisiete cuentos y dos pingüinos fue su primera publicación en el año 2000 y desde entonces no ha dejado de publicar y de ganar premios, como el actual de Anaya o el Barco de Vapor de SM. Su estilo literario contiene una gran chispa de humor infantil. Sus historias engrandecen los detalles simples de la vida, la amistad, un amanecer, los vecinos, la libertad, nuestras mascotas. Nos enseña a pararnos y contemplar la suerte que tenemos.

Ficha literaria: Mi abuelo tenía un hotel, de Daniel Nesquens. XVII Premio Anaya de literatura Infantil. Editorial: Anaya Madrid