El gran Pablo Milanés estará esta noche en concierto en La Línea

El Campo de Gibraltar y, en particular, La Línea se encuentran hoy de enhorabuena musical. Pablo Milanés, una de las grandes figuras de las últimas décadas, autor de canciones inamovibles ya del imaginario colectivo, estará en concierto en el Palacio de Exposiciones y Congresos. Será a partir de las 21.00 horas.

El cantautor cubano ha firmado e interpretado muchas de las más bellas canciones de amor y desamor que se han escrito en español. La otra cara de Milanés son las canciones comprometidos, que representan un testimonio de sus convicciones, que escapan del maniqueísmo.

El artista, actualmente en gira por España y parte de Europa, centrará su recital en su último disco, Regalo, editado en 2008, alternando esas composiciones con clásicos de su carrera compositiva. Es autor de temas que se han ganado su lugar entre los clásicos como Yolanda, El primer amor, El amor de mi vida, Jacaranda, Para vivir, Nostalgia, De qué callada manera o Identidad.

El concierto de esta noche tendrá un formato acústico y en él el cubano estará acompañado por los músicos Miguel Núñez, al piano, y el violinista y teclista Dagoberto González.

La trayectoria musical de Milanés arranca con aquel muchacho de Bayamo (24 de febrero de 1943) que acudió a concursos de aficionados. Ya en La Habana formó parte del Cuarteto del Rey y Los Bucaneros hasta que, contagiado por la efervescencia del momento, se convirtió en un cantautor con letras sociales.

Durante varios años, el cubano realizó estudios de composición, armonía, contrapunto y orquestación como discípulo de los maestros Leo Brouwer, Federico Smith y Juan Elosegui. En 1968 el cantautor se integró al Centro de la Canción de Protesta de la Casa de las Américas y desde 1972 fue parte fundamental del Grupo de Experimentación Sonora (GES), génesis del movimiento de la Nueva Trova Cubana, de la que fue uno de los fundadores.

Todo se conjugó para que la Nueva Trova lograra un inmenso impacto, tanto dentro como fuera de la isla. Silvio Rodríguez fue el favorito de los intelectuales y Milanés logró ganarse al pueblo con un arte cálido y riguroso en lo literario y en lo musical. El intérprete reivindicó a la trova tradicional y al filin (bolero marcado por el jazz) habanero, además de proteger a gigantes desconocidos entonces como Cotán y Compay Segundo.

Entre la vasta discografía de Milanés aparecen, entre otros, primeros trabajos como Versos de José Martí (1973), Pablo Milanés (1976) o No me pidas (1976) y otros albumes como Proposiciones (1988), Identidad (1990), Plegaria (1996), Vengo naciendo (1999), Pablo querido (2002) y La más completa colección (2003).