Marítimas
Nueva naviera en el Estrecho

El mestizaje español

España diversa | Crítica

Eduardo Manzano defiende que lo cambiadizo es la esencia que nos define 

Eduardo Manzano. / Antonio Pizarro

La ficha

España diversa. Claves de una España prural. Eduardo Manzano. Crítica. 548 páginas. 24,90 euros 

 Este España diversa del profesor e historiador Eduardo Manzano, voz autorizada en la historia de al-Andalus, ha alcanzado varias ediciones. Su éxito demuestra que, en medio de la gresca bipolar (los hunos y los hotros, dicho al unamuniano modo), el interés por España ocupa su espacio en ámbitos más saludables que los que ofrecen políticos y publicistas mediáticos.  

Su libro es todo un desmontaje de la España monolítica. Si algo nos caracteriza en el largo entretanto de los siglos es la identidad cambiadiza y la saludable impureza. No existe, pues, esa España pretendidamente uniforme nacida bajo el alerón de don Pelayo. Cuando una y otra vez se advierte del peligro de que el país acabe convertido en una miríada de reinos de taifas se olvida que, como bien recuerda el autor, si hubo un periodo verdaderamente brillante en la historia de nuestro país, ese fue el de las taifas, con sus reyezuelos brillantes y magníficos (el de Zaragoza, un extraordinario matemático, y el de Sevilla, Al Mutamid, un bardo notable). 

Los discursos de identidad tribal acerca de España es sólo una tramoya llena de trampas, pero que también alcanza a los nocivos particularismos vasco y catalán. Si algo resulta desazonante aún hoy, es el profundo desconocimiento que tenemos del legado de al-Andalus. No se trata de vindicar una armonía que tal vez no fuera el florido crisol de abrazos culturales que tanto defienden los andalusíes del siglo XXI. Pero, ¿cómo olvidar que Madrid es la única capital europea de origen árabe? ¿O cómo soslayar que la primera historia de España la escribió un árabe en el siglo X en la Córdoba omeya? El enterramiento del legado judío es consabido. Pero pocos conocen el aporte de los gitanos a la historia de España y al menudeo de muchos quehaceres prácticos que hemos heredado gracias a ellos. 

España diversa desmonta, pues, los discursos unicejos: Reconquista, Reyes Católicos, Imperio, conquista de América, los Austrias, la unificación borbónica, la larga noche de la cruzada franquista. Manzano critica también a los unicejos de izquierda y les hace ver que la historia del país no se circunscribe empobrecedoramente a la guerra civil española. La trinchera culturalmente progresista es igualmente sesgada y por ello deliberadamente ridícula. La diversidad es en sí misma nuestra esencia. 

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Cónclave | Crítica

Tempestad sobre el Vaticano

Lo último