Un 14 de julio para la historia

Promete como nunca hizo un domingo de mediados de julio. En este mes tan vacacional y cuando entonces era el Tour y las escaramuzas implacables de Indurain lo poco que nos mantenía pendientes de la caja tonta. Estar al tanto de los fichajes al confort de la tumbona en la orilla del mar nos mantenía con la atención en buen estado de revista, pero vamos a ver cómo llega este 14 de julio, tan en medio de la nada estival.

Tenemos por delante la final de Wimbledon y la que en Berlín cierra la Eurocopa. Son dos platos fuertes que ganan en contenido por el protagonismo español. Abre el fuego ese prodigio tenístico que es Carlos Alcaraz, que por si fuera poco el interés que despierta, resulta que ha sido nombrado trianero adoptivo, conque más madera en los prolegómenos de esa final con los ingleses que nos trae sin sueño desde el golazo de Lamine Yamal a los franceses.

Dos platos de tremendo calado, pues si en Wimbledon nos encontraremos con un obstáculo llamado Novak Djokovic, Nole para los amigos, en el Olímpico de Berlín nos estarán aguardando los inventores de este juego sin igual llamado fútbol. ¿Habrá derrotado para entonces el nuevo trianero al excepcional tenista serbio? Si es así nos encontraremos con Inglaterra magníficamente dopados anímicamente y con las posibilidades de éxito en muy buen estado de revista.

Hoy se conmemora la Toma de la Bastilla, pero Francia ya cayó el pasado martes y ahora nos encontramos con Inglaterra, tan necesitada de acarrear plata a sus vitrinas. ¿Consideramos a España favorita? Es complicado el aserto, pero que es mejor equipo que los pross no lo duda nadie. A ver cómo se comportan Nico y Lamine tras sus respectivos cumpleaños y también cómo Carlitos se las compuso con el genio serbio y así este domingo 14 de julio se recuerda a perpetuidad.