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Tribuna libre
Este Archivo contiene documentación de las distintas poblaciones del Campo de Gibraltar y Ceuta, pertenecientes al ámbito del Ilustre Colegio de Notarios de Sevilla. Las cajas correspondientes a Tarifa están numeradas desde el número 629 al 1.065; es decir, hay 436 cajas conteniendo unos 1.700 legajos de documentos notariales de un periodo cronológico que va desde el año 1557 hasta el 1899.
Son todas escrituras de notarios, llamados escribanos en el Antiguo Régimen, emitidas durante más de tres siglos, que afectan a personas y personajes de todas las clases y tipos de la sociedad tarifeña. La cantidad de datos, nombres, hechos, etc., que nos ofrecen es extraordinariamente abundante y variadísima: multitud de escrituras de compraventas y de arrendamientos de casas, tierras, animales, enseres, etc.; de contratos de toda clase, de formación de sociedades, de testamentos, de fianzas, de obligaciones, etc.
Ni que decir tiene que esta documentación resulta esencial para ir reconstruyendo con fundamentos fidedignos la vasta memoria histórica de la milenaria ciudad de Tarifa.
El estado de conservación de estos legajos va de regular a pésimo, pasando por distintos niveles de daños. Aparentemente, han estado expuestos durante siglos a desastrosas condiciones de almacenamiento. Hay volúmenes que tienen todas sus escrituras al completo; otros a los que les falta algunos folios … hasta los que solo quedan de ellos unas cuantas hojas sueltas. Muchos han sido mojados o están afectados por la humedad. Prácticamente ninguno de los libros está en perfectas condiciones.
La mayor parte de los tomos han perdido su cubierta de cuero o de papel cartón, y a algunos les queda restos de ella en distintos grados de deterioro. Son numerosos los que tienen el papel tan dañado que al abrirlos la hoja se hace minúsculos trocitos que se desprenden o se convierte prácticamente en polvo. En otros, los folios están agujereados por las polillas y gusanos. En algunos legajos los folios no se pueden separar sin rasgarlos. Incluso los hay que están hechos un bloque compacto y duro, o sea, petrificados.
La legislación recoge y dispone la adecuada conservación, restauración y facilidad de consulta de esta riquísima fuente de información histórica. El que se cumpla es tarea y obligación inexcusable de las autoridades competentes.
Desde hace bastantes años, los investigadores interesados venimos planteando la necesaria mejora en la gestión de este archivo histórico, cuya documentación debe estar a disposición de los historiadores sin impedimentos ni arbitrarias cortapisas burocráticas.
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