“Los resultados en terapia génica son prometedores”
Dr. Serafín Sánchez, presidente de la Sociedad Española de Otorrinolaringología
Especialista en el Hospital Virgen Macarena de Sevilla, acaba de coger el timón de la sociedad científica nacional que agrupa a su especialidad
El doctor Serafín Sánchez ha sido proclamado nuevo presidente de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC) durante su último congreso nacional celebrado en Málaga.
-¿Cómo asume la presidencia de la Sociedad Española de Otorrinolaringología, y cuáles son las rmetas que se plantea?
-Primero, con un gran honor y una gran responsabilidad. La confianza de los socios y socias me motiva a consolidar el nivel científico de nuestra sociedad, que tiene una historia de 75 años. Mi objetivo es impulsar innovaciones tecnológicas, especialmente en cirugía robótica, implantes cocleares, dispositivos auditivos implantables y en la aplicación de la inteligencia artificial. Además, busco darle valor a cada una de las diez áreas anatómicas y funcionales que conforman nuestra especialidad, mostrando su relevancia dentro y fuera del ámbito médico.
-La incorporación de la innovación, ¿es solo cuestión de recursos o también depende de la organización sanitaria y del impulso de los propios especialistas?
-Sin duda, la tecnología es esencial, pero también lo es la organización. Queremos impulsar la acreditación de unidades de referencia para dar visibilidad a los servicios de otorrinolaringología de primera categoría en España. Así, no solo el ámbito médico, sino también la sociedad en general, podrá conocer la calidad asistencial que ofrecemos. Este año hemos comenzado a acreditar unidades en áreas específicas, como inflamación nasal y patologías tiroideas, y seguiremos con otras como enfermedades de la voz, deglución, audiología, y el sueño. Para 2025, esperamos completar el modelo de acreditación para muchas de estas unidades.
La relación con los pacientes ha sido siempre un pilar fundamental en nuestra especialidad”
-¿En la formación continuada existe alguna necesidad que merezca la pena cubrir?
-La formación es uno de los pilares de nuestra sociedad científica, y por ello promovemos becas y ayudas para que especialistas y residentes puedan formarse en centros internacionales. Queremos extender la duración de la residencia en otorrinolaringología de cuatro a cinco años, dado el aumento en el nivel de conocimientos y avances tecnológicos. Creemos que esta extensión permitiría formar especialistas mejor preparados para enfrentar los retos actuales y futuros de la especialidad.
-Respecto a la relación con los pacientes, ¿qué papel juegan las asociaciones de pacientes en su visión de una atención humanizada y empoderada?
-La relación con los pacientes ha sido siempre un pilar fundamental en nuestra especialidad. Tratamos con problemas que afectan a la calidad de vida, como el olfato, el gusto y la audición. Esto hace que nuestro enfoque sea diferente al de otras especialidades, ya que atendemos aspectos que impactan profundamente en el día a día de los pacientes. Colaboramos con asociaciones de pacientes y familias, especialmente en áreas como la hipoacusia o las laringectomías, para brindar apoyo en su tratamiento y recuperación. Esto es esencial en nuestra especialidad, ya que muchas de estas personas requieren un soporte continuo incluso fuera del hospital.
Hemos comenzado a acreditar unidades en áreas específicas, como inflamación nasal y patologías tiroideas”
-¿Considera que existen áreas de colaboración con otras especialidades?
-Absolutamente. Trabajamos estrechamente con especialidades como cirugía maxilofacial, plástica, neurocirugía, oftalmología y pediatría. También colaboramos en casos de pacientes con problemas multisensoriales, como niños sordociegos, para proporcionarles una atención integral en conjunto con los oftalmólogos. Esta colaboración interdisciplinaria nos permite ofrecer una atención mucho más completa y efectiva.
-¿Con qué percepción social cuenta su especialidad?
-La otorrinolaringología es una especialidad con una larga historia en España, pero quizá no suficientemente visible en la sociedad. Abarca múltiples áreas que impactan en la vida cotidiana, como la audición, el equilibrio y la voz. Creo que debemos visibilizar mejor el valor de nuestra labor, tanto en el ámbito quirúrgico como en el terapéutico, para que la población conozca los beneficios que podemos aportar a su calidad de vida.
-¿Existen barreras en el acceso a innovaciones terapéutica?
- Sí, el presupuesto es una barrera, especialmente para tratamientos innovadores como los fármacos biológicos y dispositivos implantables. Sin embargo, en España estamos empezando a ver resultados muy prometedores con la terapia génica, que incluso ha permitido que niños curen su sordera. Este tipo de innovaciones abrirá nuevas oportunidades para tratar y, en algunos casos, curar enfermedades hasta ahora incurables.
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