"Siento más alegría y gratitud porque el galardón de San Roque proviene de la afición flamenca"

San Roque/La V Bienal de Arte Flamenco Canela de San Roque, organizada por el ayuntamiento de la localidad campogibraltareña, vivirá este viernes su día grande con un teatro Juan Luis Galiardo con todos sus asientos ocupados y algunos rezagados lamentando no haber sido más rápidos a la hora de comprar las entradas, agotadas desde hace tiempo. Miguel Poveda anuncia un recital flamenco, su "música raíz", inmerso como está en la gira de Poema del Cante Jondo, un homenaje a Federico García Lorca que es también un reencuentro con el poeta granadino, "un gesto de gratitud".

Poveda, nacido en Barcelona en 1973, está muy ligado a Andalucía desde siempre y donde reside desde hace años. Mantiene una trayectoria muy coherente, a partir del flamenco y de la copla, impulsada en 1993 por su triunfo en el 33º Festival del Cante de las Minas de La Unión (Murcia) y construida por grabaciones reconocidas por su calidad y por su riqueza artística. Algunos le recuerdan también como aquel jovencito de la película La teta y la luna, película de Bigas Luna, estrenada un año después de su éxito minero, en 1994.

Pregunta.⁠Va a recoger el galardón de la V Bienal Canela de San Roque. ¿Cómo le sientan estos reconocimientos?

Respuesta.Pues sientan con cierta responsabilidad mezclada con alegría y gratitud, sobre todo. Y sin desmerecer a otros premios recibidos, porque viene de la afición flamenca.

P.¿En el teatro Juan Luis Galiardo escucharemos al Poveda más flamenco?

R.Si quiere decir que en esta ocasión solo abordaré un repertorio de flamenco tradicional, sí. En algunas giras, además de expresarme con palos de flamenco, que es mi música de raíz, he presentado mis propuestas musicales que están más cerca de la canción a través de poemas de diferentes autores del siglo de oro y algunos más actuales, también la canción andaluza escrita por Rafaél de León o Antonio Gallardo, a los que admiro profundamente. Pero es verdad que en este recital me centro solo en el cante tradicional.

P.Usted se ha definido como un aficionado al flamenco y a la copla. ¿La humildad y el respeto es la mejor forma de ser, o esa disposición es por su alto nivel de exigencia?

R.Ambas cosas. Siento un respeto grandísimo por la tradición y todos esos valores se los debo a mis padres, y espero reforzarlos día a día, pero también hay un alto nivel de autoexigencia que se acrecenta con los años.

P.El flamenco es mestizaje. ¿Cuánto se alimenta de la copla?

R.Todo lo que el flamenco se ha nutrido de ella a lo largo de la historia. Son músicas que han convido siempre sin complejos como lo han demostrado artistas como Fernanda y Bernarda de Utrera, La Niña de los Peines, Vallejo o Valderrama, entre muchos otros.

P.¿Dónde quiere que le lleve esa forma de entender la música que tiene?

R.Simplemente a comunicarme con quien sienta la vida y el arte como yo lo siento. Dispuesto a escuchar también a quien tenga un sabio consejo que darme para aprender y crecer a todos los niveles a través del arte.

P.¿Lorca y el flamenco, su último espectáculo, es un viaje a sus entrañas?

R.Sin duda con ambos, que en muchos casos son lo mismo, puedo contemplar la vida con más belleza y más lleno de valores. Me agarro a ellos como salvavidas y fuente de energía y aprendizaje para seguir creyendo que merece la pena seguir en este planeta en el que desgraciadamente también habita lo terrorífico y cruel.

P.¿Hacia donde cree usted que camina el Flamenco hoy?

R.Hacia la diversidad, pero con los valores que veo en esta nueva generación de conservar la tradición. Es admirable ver que tantos artistas jóvenes y otros que ya entran en cierta madurez han vuelto a tomar como punto de partida la tradición. Pero también con la libertad de aportar su personalidad y sin dar la espalda a todo lo que les rodea, porque iría contra natura comportarse o ser como éramos hace 100 años.

P.¿Hay que renovar las letras de los cantes para contar la nueva sociedad?

R.Por suerte hay muchas letras que son atemporales, incluso algunas que parecen escritas hoy día. Pero también es necesario que en algunos casos se haga revisión y se manifieste todo lo que nos preocupa hoy, o lo que nos emociona desde una perspectiva actual.