San Roque construirá un parque infantil de temática romana en Guadiaro por 1,2 millones

El Ayuntamiento de San Roque emprenderá la próxima semana la construcción del parque infantil Barbésula, en Guadiaro, con una inversión de 1,2 millones de euros y seis meses de plazo para unas obras adjudicadas a la empresa Drainsal.

El parque se proyecta dentro del recinto ferial de Guadiaro, en una parcela de una superficie aproximada de 2.500 metros cuadrados ocupada actualmente por el parque canino, que será trasladado a una zona contigua. El parque pretende hacer referencia al origen romano de la barriada, por lo que su diseño está tematizado tanto en los elementos de juego como en el cerramiento y en los pavimentos.

El cerramiento del parque estará formado por columnas de acero con capitel, jugando con dos alturas distintas de columna, para simular ser columnas romanas mientras que el camino -en caucho continuo- pretenderá ser una calzada para recorrer el parque por todas sus zonas.

Entre los elementos de juego previstos, habrá un fuerte romano de 20 metros de largo y 6 metros de alto con dos grandes toboganes de acero inoxidable que saldrán de su interior. También contará con columpio axial de gran formato sustentado por ocho columnas tematizadas y un columpio con cesta nido. En el camino trazado por la calzada habrá un carrusel inclusivo protegido con carpa.

Otros elementos incluidos en el proyecto son una colchoneta de salto circular de 14 metros de diámetro, tematizada con elementos romanos y rodeada de arena. Alrededor de esta colchoneta habrá un elemento que simulará ser un coliseo romano, realizado en estructura metálica con distintos arcos romanos dispuestos en tres pisos, el cual cuenta también con elementos de juego de trepa de cuerdas. La calzada romana bordea por completo el coliseo y, por tanto, la colchoneta de saltos.

Se instalará otra colchoneta, en este caso de 6 metros de diámetro y tematizada como un escudo romano, también con perímetro de arena. La última zona de juegos será el río, pavimentado en caucho de azul, donde se instalará un barco romano de 15 metros de longitud con múltiples juegos, así como tres muelles para los más pequeños, los cuales estarán protegidos por carpas.

Entre el elemento río y el borde del parque habrá una franja ajardinada en césped natural y arboleda que hará alusión al margen contrario del río, San Enrique.

El parque tendrá alumbrado público independiente y mobiliario urbano, compuesto por bancos de fundición-madera, bancos elipsoides de hormigón, papeleras y una fuente para beber.