Verdemar se opone a un proyecto residencial en Sotogrande por su impacto ambiental y el riesgo de inundaciones

San Roque/La asociación ecologista Verdemar ha expresado su oposición al proyecto de urbanización del subsector 27-SO del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de San Roque, situado en la desembocadura del río Guadiaro, en Sotogrande. El Ayuntamiento está tramitando una autorización ambiental para convertir una zona históricamente destinada a torneos de polo en un desarrollo residencial con 219 viviendas.

Verdemar sostiene que este plan, al situarse en una zona inundable, requiere una evaluación ambiental ordinaria, ya que puede tener efectos significativos sobre el medio ambiente, según el artículo 36.1 de la Ley 7/2007 de gestión integrada de la calidad ambiental. La actuación se llevará a cabo junto a la Zona de Especial Conservación (ZEC) ríos Guadiaro y Hozgarganta, áreas protegidas por su biodiversidad.

Además, la zona se encuentra cerca del yacimiento arqueológico de la ciudad romana de Barbésula, un sitio de gran importancia histórica que fue clave en el siglo I a.C. La asociación ecologista destaca que la modificación de este suelo para uso residencial podría alterar no solo el entorno natural, sino también el patrimonio cultural local.

Uno de los principales argumentos de Verdemar es la incompatibilidad del proyecto con la planificación hidrológica, especialmente con respecto a la peligrosidad por inundaciones. Según mapas de riesgo, el área se encuentra dentro de una zona de alta peligrosidad, que ya ha sufrido inundaciones en el pasado. Además, la modificación de terrenos en la otra orilla del río, con taludes elevados para la protección de las canchas de polo, ha incrementado el riesgo en el área afectada.

Verdemar insiste en que la evaluación medioambiental presentada no aborda adecuadamente los riesgos de inundación ni los posibles impactos en las zonas colindantes, incluida la isla del río Guadiaro, ni en las ZEC de los ríos Guadiaro y Hozgarganta. La asociación solicita que se amplíe la evaluación para estudiar estos efectos y garantizar la seguridad y sostenibilidad del proyecto.