Tres burros sueltos paralizan el tráfico en la autovía A-7 a su paso por Sotogrande
La presencia de los animales en la calzada obliga a cortar la autovía para evitar accidentes

San Roque/Peligro en la autovía. Tres burros desorientados han irrumpido esta mañana en plena A-7, a la altura del kilómetro que conecta Pueblo Nuevo de Guadiaro con Sotogrande, en el término municipal de San Roque. La situación ha obligado a cortar temporalmente el tráfico en un sentido para evitar posibles accidentes en una vía de alta velocidad y tráfico intenso.
Los animales han sido avistados sobre el asfalto alrededor de las 10:00 de la mañana, provocando momentos de tensión entre los conductores. Agentes de la Guardia Civil de Tráfico y de la Policía Local han intervenido rápidamente para despejar la zona y evitar un desenlace trágico.
Aunque todavía no se ha confirmado su procedencia, todo apunta a que los burros podrían haberse escapado de alguna de las numerosas cuadras y caballerizas situadas junto al cauce del río Guadiaro. La zona, conocida por su actividad hípica, alberga desde hace décadas negocios vinculados al mundo del caballo y el turismo ecuestre.
Más allá de la anécdota y del susto, el incidente pone de nuevo sobre la mesa la situación de una especie tradicionalmente ligada a la vida rural y hoy en día en declive. El burro, símbolo de labores agrícolas y de una España en blanco y negro, ha ido desapareciendo progresivamente del paisaje. La introducción de maquinaria en el campo, sobre todo en países en vías de desarrollo, ha relegado su uso hasta cifras preocupantes.
En respuesta a esta tendencia, en los últimos años han surgido en todo el país reservas, asociaciones y proyectos que luchan por conservar esta especie y darle nuevos roles. Hoy, lejos de arar la tierra, los burros trabajan en rutas de senderismo, actividades educativas y terapias asistidas, donde su temperamento tranquilo lo convierten en aliados insustituibles.