La plataforma 'Tarifa no se vende' prepara alegaciones al convenio del frente litoral

Tarifa/Tarifa no se vende, la plataforma ciudadana surgida para evitar que se apruebe definitivamente la reforma del frente litoral de la localidad suscrita por el Ayuntamiento y la promotora marbellí Granparcela, ha defendido este domingo que dicho convenio urbanístico "obvia por completo los derechos básicos de ciudadanía" y "profundiza en los problemas estructurales" de la ciudad. Por ello, trabaja en distintas acciones, entre las que estarían la preparación de alegaciones al anuncio del convenio en el BOP, la recogida de firmas, reuniones con diferentes sectores de la población, así como la convocatoria a los ciudadanos y a todos los colectivos y organizaciones sociales para mostrar una vez más el rechazo mayoritario al convenio.

El único objetivo es que el actual equipo de gobierno formado por PP y NAT "tome conciencia y desista de su firma". "Todavía se puede renunciar a la firma del convenio sin que existan implicaciones legales y económicas para el Ayuntamiento de Tarifa", subraya la plataforma, que también muestra su rechazo a unas recientes declaraciones del primer teniente de alcalde, Jorge Benítez, "que solo han servido para confundir más a la ciudadanía que asistió al encuentro informativo organizado en busca de respuestas a las principales dudas, sin contar las continuas contradicciones en las que incurrió en su intervención". Es por esto que la plataforma Tarifa no se vende exhorta al alcalde, como máxima autoridad local, a que corrija esas declaraciones. Además le solicita que el próximo pleno en que se vaya a tratar este importante tema sea en horario de tarde para facilitar la máxima participación ciudadana.

La plataforma surge "al calor de la movilización por el derecho a vivir mejor y en respuesta al convenio urbanístico que el Ayuntamiento de Tarifa pretende firmar con la empresa GranParcela, S.L. para urbanizar más de 150 mil metros cuadrados del frente litoral urbano a espaldas de los intereses y necesidades de la mayoría de la población". Se constituyó el pasado 17 de septiembre en una reunión de trabajo abierta con el propósito de "caminar hacia un municipio sostenible, económico y social que se haga cargo del presente mirando al futuro y que sea acorde a los intereses y necesidades de la mayoría de ciudadanos y ciudadanas que viven, desean vivir y desean volver a Tarifa".

La plataforma también está "abierta al apoyo de los grupos y partidos políticos, asociaciones, organizaciones y colectivos sociales de cualquier ámbito, sin que ello suponga la representación de la plataforma". En cuanto a su estructura organizativa, Tarifa no se vende se compone inicialmente de tres comisiones: jurídica, de comunicación y urbanística , en la que cualquiera puede participar. "El trabajo transversal será el motor de las comisiones que componen la plataforma con el fin de concentrar las actuaciones a realizar. Arrancan así los equipos con la elección de los portavoces que coordinarán los diferentes equipos de las comisiones", dice. 

"Tarifa no se vende quiere abrir una conversación pública con toda la ciudadanía tarifeña para caminar hacia un municipio que permita vivir", entiende la plataforma, que apostilla que "el convenio con GranParcela, S.L. es un epifenómeno y que la enorme respuesta ciudadana tiene su fundamento, por un lado, en el agotamiento del actual modelo que choca con los límites físicos, mentales y naturales, y por otro, en el deseo de organizar el territorio y las relaciones sociales en base al derecho a vivir mejor".

"Problemas estructurales como el acceso a una vivienda en condiciones de igualdad, la fuerte erosión del medio natural, la desaparición de los espacios públicos para socializar sin consumir o la devaluación de los centros educativos, en definitiva, vidas más tranquilas, son temas fundamentales que la plataforma quiere pensar en colectivo", concluye.