La Cueva de Atlanterra, un recorrido del Paleolítico Superior hasta finales de la Prehistoria en Tarifa

El Parque Natural del Estrecho no solo destaca por la riqueza de su fauna y su flora, también es un lugar para adentrarse en la historia del Campo de Gibraltar, mejor dicho, en la Prehistoria, puesto que en su interior se encuentran multitudes de enclaves que permiten hacer un recorrido por diferentes etapas a través de manifestaciones de arte rupestre como es el caso de la Cueva de Atlanterra.

En Tarifa también se encuentran otras cavidades como la Cueva del Moro, aunque, en este caso, la de Atlanterra se encuentra protegida con una verja que no permite el acceso a su interior tras haber sido víctima de multitud de actos vandálicos que han acabado con gran parte de su patrimonio.

El arte rupestre que se ha encontrado y analizado en el interior de la cueva se ha encasillado en diferentes cronologías a lo largo de los años, desde la paleolítica hasta la solútreo magdaleniense, destacando, sobre todo, una figura en todos los estudios, la cierva trilineal.

Una de las representaciones más populares son los puntiformes. A lo largo de la cueva pueden observarse distribuidos de distintas formas por sus paredes, incluso por el techo, ya sean agrupados en líneas paralelas o sin ningún orden, además, varían en su diámetro.

Los antropomorfos también tienen hueco en este enclave tarifeño. Las figuras de los humanos están repartidas por toda la zona, representados de forma cruciforme y con trazos simples de color rojizo claro. Uno de los más interesantes es la agrupación de tres de ellos unidos por sus brazos.

Las figuras zoomorfas esquemáticas son las menos abundantes, aunque pueden localizarse algunas que destacan por estar formadas por trazos simples horizontales que simbolizan el cuerpo y la cabeza con las extremidades saliendo de ellos en perpendicular.

El arte rupestre de gran valor que se encuentra en la Cueva de Atlanterra ha sido alterado en múltiples ocasiones por actos vandálicos, observándose en sus paredes distintos grafitis que han obligado a vallar la zona e impedir el paso.