Descubre los mejores lugares para recoger setas en el Campo de Gibraltar

Con la entrada del otoño y las primeras lluvias, algo que este año está tardando en llegar, el Campo de Gibraltar se convierte en el lugar perfecto para la recolección de setas, pues aquí se encuentra el Parque Natural de Los Alcornocales, todo un paraíso para los amantes de la micología.

Octubre, noviembre y diciembre suelen ser los meses predilectos para salir al campo a buscar distintas setas y hongos, estar en contacto con la naturaleza y disfrutar de una gastronomía marcada por estos alimentos, entre los que destaca la Chantarella, todo un tesoro que puedes encontrar en la zona.

Es importante que a la hora de realizar estas salidas conozcas bien las variedades comestibles, puesto que puedes toparte con especies bastante peligrosas. Los expertos recomiendan desechar aquellas sobre las que se tengan dudas para evitar problemas, además, también aconsejan cortar las setas por el pie con cuchillos o navajas de hojas estrechas para no destruirlas.

A pesar de que el Parque Natural de Los Alcornocales es bastante extenso, te recomendamos que acudas a los siguientes puntos para que, además de disfrutar de una jornada micológica, puedas realizar una ruta senderista.

La Montera del Torero

Para empezar la ruta hay que trasladarse hasta Los Barrios, concretamente hasta el área recreativa de La Montera del Torero. Una vez allí, el camino comienza a pie en dirección accedente a través de un vallado para el ganado vacuno, puesto que allí habitan vacas retintas que, si no les molestas, no notarás su presencia.

El trayecto conduce hasta la Cueva de las Bailaoras, un lugar en el que se encuentran distintas pinturas rupestres y que sirve como zona de descanso antes de continuar el camino. Allí puedes recolectar champiñones. También, continuando el camino, hallarás boletus.

Valdeinfierno

Buena parte de esta ruta coincide con el de la cañada real de San Roque. En esta ocasión, el sendero atraviesa el monte de Valdeinfierno en paralelo al arroyo de su mismo nombre.

El camino, en forma circular, puede alcanzar los 5,2 kilómetros, un espacio donde puedes encontrar hongos silvestres o setas gracias a la humedad que aporta el curso del agua.