Horario y recorrido del arrastre de latas y de la cabalgata de Reyes de Algeciras

El 5 de enero, Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente recorrerán las calles de Algeciras en carrozas, acompañados de los pajes reales y lanzando caramelos para llevar la ilusión a todos los niños de la ciudad. Antes, los más pequeños protagonizarán el tradicional arrastre de latas para darles la bienvenida en el Llano Amarillo.

El Ayuntamiento algecireño ha preparado un recorrido adaptado a las dimensiones de los vehículos que transportarán a los Reyes, primando la seguridad de todos los participantes y con el objetivo de que se luzcan los diseños.

Arrastre de latas

El tradicional arrastre de latas partirá de la Plaza Andalucía a las 12:00. Los más pequeños recorrerán con sus esculturas la avenida Blas Infante y la Avenida Virgen del Carmen hasta llegar al Llano Amarillo.

La concentración para este evento será dos horas antes, a las 10:00, con el objetivo de exponer todas las creaciones en dicha plaza.

Una vez concluido el arrastre, los Reyes Magos llegarán en el barco Zenit Cat desde Oriente hasta el llano a las 13:30. Previamente se celebrará un sorteo de tres grandes premios y bolsas de regalo para amenizar la espera.

Cabalgata de Reyes

El punto de partida será la Delegación de Hacienda a las 17:00. Desde ahí partirán hacia la avenida Virgen del Carmen hasta la altura del centro comercial El Corte Inglés, continuarán por Capitán Ontañón, para girar a la derecha hacia Ramón y Cajal y llegar a Fuerzas Armadas. Una vez allí recorrerán Blas Infante, bajando por esta avenida hasta el recinto arqueológico de las murallas medievales, donde finalizará el cortejo y estarán instalados los tronos en los que Sus Majestades de Oriente recibirán las últimas cartas de los niños.

La leyenda del arrastre de latas

Hay varias leyendas del origen de esta tradición que comenzó en Algeciras y se ha extendido ya por otros puntos del Campo de Gibraltar. La más conocida es la escrita en el cuento de Juan Ignacio Pérez El gigante Botafuegos.

En la obra, el autor recupera la historia de un gigante llamado Botafuegos que vivió en Algeciras. Este no quería que os niños recibieran regalos de Reyes, por lo que encendió una hoguera para provocar una humareda que cubriera la ciudad e impidiera que Melchor, Gaspar y Baltasar avistaran tierra.

En ese momento, los niños algecireños salieron a la calle a hacer ruido con sus latas para guiar a sus Majestades de Oriente hasta sus casas y evitar así la niebla creada por Botafugos.

Otra de las leyendas se centra en épocas de pobreza. Los niños de Algeciras se quedaron sin regalos, por lo que sus padres les dijeron que los Reyes se habían olvidado de la ciudad, así pues, decidieron que todos los años harían un llamamiento haciendo ruido por las calles del municipio.

La última de las tres historias más conocidas relata que era una forma de mostrarle a los Reyes que sus juguetes estaban viejos. Los niños salían a la calle a arrastrar sus juguetes de hojalata y hacían ruido para pedir unos nuevos.