La directora Irene Delgado-Jiménez presenta un gran concierto de música clásica en Algeciras

Divertimento en fa mayor, "Sinfonía Salzburgo núm. 3", de Mozart; la Suite Holberg de Grieg y la Serenata para cuerdas de Dvořák es el variado repertorio que ha preparado la directora Irene Delgado-Jiménez para la primera actuación de Thalassa Orchestra en el Teatro Florida de Algeciras, el próximo 18 de marzo, la primera orquesta profesional del Campo de Gibraltar.

"He elegido estas piezas porque sé que el público va a ser muy variado y mi objetivo es que todo el mundo tenga la oportunidad de conectar con alguna de las obras", explica Delgado-Jiménez, quien podría haber optado por algo más convencional, y también sencillo, como una selección de barroco y clásico. "Vamos a ofrecer un producto de mucha calidad interpretado por una orquesta de cuerda donde haré de maestra de ceremonias para que no sea solamente un concierto de música clásica". El único requisito para asistir al concierto es sentir curiosidad.

"Mi obsesión es la divulgación, es decir, que la gente comprenda los entresijos de la música clásica. Entiendo que resulta más fácil conectar con una canción actual que con una pieza que tiene dos siglos. Ése es el objetivo de Thalassa Music Project: explicar y difundir", asegura la directora algecireña. "En el Campo de Gibraltar, esta tarea resulta aún más necesaria porque le gente lo pide. Lo hemos demostrado en las sesiones de Café con Clásica", una exitosa iniciativa que acerca a los asistentes las grandes obras del género.

En la presentación del cartel de este concierto inaugural han acudido el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, junto a la teniente de alcalde delegada de Cultura, Pilar Pintor. Landaluce ha agradecido a la artista que "no sólo haya traído este magnífico concierto de música clásica a nuestra ciudad, sino la gran proyección internacional que está haciendo de Algeciras".

Los compases perdidos de Dvořák

En la elección de la Serenata para cuerdas de Dvořák se une otra singularidad. La directora de Algeciras ha conseguido unos compases perdidos que el compositor checo descartó en su momento y que, por primera vez, van a sonar en concierto. "Es un experimento un poco arriesgado", cuenta Delgado-Jiménez. "Me hace ilusión porque aporta un golpe de innovación al evento en el Teatro Florida, además de ser un valor añadido para la orquesta".

Profesionales y buenas personas

La concertino, el primer violín de Thalassa Orchestra, Clara Gris, ha sido la encargada de seleccionar a los músicos de esta orquesta de cámara que tocará el 18 de marzo, la mayoría gaditanos, malagueños y sevillanos. El requisito indispensable era que todos hubieran terminado sus estudios de Música, es decir, que fueran profesionales, además de ser competentes "y buenas personas", añade Delgado-Jiménez.

"Quiero que todos los músicos cobren dignamente", afirma la directora, quien ha conseguido como patrocinador para el concierto al grupo Guadacorte. La venta de entradas marcha a buen ritmo, con medio aforo vendido hasta la fecha.

Los ensayos se llevarán a cabo el día 17 y el propio 18 de marzo, horas antes del concierto. Al ensayo general han sido invitados los niños de la Escuela de Música de Barrio Vivo en La Piñera, un grupo de jóvenes en riesgo de exclusión social.

Las entradas están a la venta a través de Internet de forma anticipada y también de forma directa en Discos Grammy por 15 euros. El concierto comienza a las ocho de la tarde. Sólo falta un pequeño detalle del que ya se está ocupando Ignacio, el padre de Irene: construir un podio de director. La gran cita de Algeciras con la música clásica ya está en marcha.