Date un paseo por el Parque Natural de Los Alcornocales en otoño

El otoño es una época fantástica para descubrir el Parque Natural Los Alcornocales. Este bosque que mantiene la humedad en cualquier época del año debido a su espeso follaje, se reparte geográficamente entre las provincias de Cádiz y Málaga. Abarca una extensión de más de 170.000 hectáreas y es conocido por ser uno de los bosques de alcornoques más extensos del mundo y por su rica biodiversidad. Los pueblos de Castellar,Jimena y Los Barrios, pertenecientes a la comarca del Campo de Gibraltar, se encuentran ubicados en pleno corazón de este parque. Ahora que han bajado las temperaturas, es un buen momento para descubrir los rincones y secretos de este extenso parque natural, que es un pulmón para el Campo de Gibraltar.

La berrea

La berrea llega con el otoño. Este nombre hace referencia al bramido que producen los ciervos machos durante la época de celo, que este año comienza alrededor del 13 de septiembre y se alarga hasta final de octubre. El sonido que emiten estos cérvidos, que pueden llegar a pesar 200 kilos, se puede escuchar al atardecer, cuando el animal anuncia su presencia a las hembras de la zona. Durante esta época los ciervos se convierten en animales nocturnos, ya que suelen berrear hasta la salida del sol. También es común oír el choque de astas, ya que sus rugidos, que atraen a las hembras, son una demostración de su dominio y fuerza frente a cualquier competidor que invada su territorio.

Caminatas

Para los amantes del senderismo y las actividades al aire libre, el Parque Natural Los Alcornocales ofrece una red extensa de senderos bien señalizados que permiten explorar sus rincones más remotos. Rutas como la del Río Hozgarganta o la subida al Picacho ofrecen vistas panorámicas impresionantes y la oportunidad de adentrarse en la espesura del bosque, donde el murmullo del agua y el crujir de las hojas secas bajo los pies crean una atmósfera de tranquilidad y serenidad.

El alcornoque

El alcornoque (Quercus suber) es un árbol característico del Mediterráneo, conocido por su corteza gruesa y esponjosa que nos surte de corcho, un material que se extrae de forma sostenible sin dañar al árbol. Este es usado principalmente para fabricar tapones de vino, es también un excelente aislante térmico y acústico. Tiene hoja perenne, por lo que en invierno los bosques de alcornoques mantienen su verdor. Sus frutos son las bellotas, que sirven de alimento a diversas especies de fauna, como jabalíes, ciervos y aves.

El alcornoque es fundamental en los bosques mediterráneos, donde puede vivir hasta 250 años. Sus raíces ayudan a prevenir la erosión y contribuyen a la conservación de especies en peligro como el lince ibérico. Se distribuye sobre todo en España y Portugal, donde forma parte de ecosistemas sostenibles que combaten la desertificación. Estos árboles son muy importantes tanto económica como ecológicamente, al ser fuente de biodiversidad y recursos renovables.