Conocido también como el Día del Trabajo, el Día Internacional de los Trabajadores se celebra cada primero de mayo para conmemorar escala nivel mundial el movimiento obrero y la fuerza laboral en reivindicación de las causas relacionadas con el trabajo. Cobran especial importancia la protección de los derechos de los trabajadores.

No siempre los avances sociales parecen ser la garantía de la protección laboral. En este artículo trato de recopilar sintéticamente los derechos más vulnerados de los trabajadores, quienes -ante la falta de sus empresas- encuentran esa garantía de protección en los tribunales del orden social.

El acoso laboral por razón de sexo es uno de los principales derechos que se ven más afectados en España. En los últimos años, se han visto incrementadas las denuncias a raíz del canal de denuncias obligatorio para empresas de más de 50 trabajadores.

Los derechos que tienen relación con la integridad física y la prevención de riesgos laborales también se ven vulnerados. Aún a día de hoy, existen empresas -no demasiadas- que incumplen, por ejemplo, al poner a una persona a trabajar con una máquina sin que haber recibido formción y esta acaba con lesiones o incluso perdiendo la vida.

Derechos relacionados con la desconexión digital. El trabajador tiene derecho a, una vez finalizada su jornada laboral, desconectar sus medios de contacto. Y aún así sucede en muchas ocasiones que reciben correos fuera de su horario, vulnerándose el derecho al descanso.

La protección de datos. Sin extenderme sobre este derecho, se producen casos de grabaciones con cámaras en los centros de trabajo sin advertir de su presencia o los despidos por usar las redes sociales.

La igualdad retributiva. Hombres y mujeres tienen derecho a percibir el mismo salario por idénticos trabajos en las empresas. En cambio, se siguen presentando reclamaciones que plantean los trabajadores y organizaciones sindicales por desigualdad de género en materia retributiva.

Ante estas vulneraciones de derechos, los trabajadores tienen la opción de denunciar ante la Inspección de Trabajo; si bien ante la limitación de sus recursos se suele acudir a la protección de Justicia. La forma usual es la presentación de una demanda en tutela de derechos fundamentales, un cauce dotado de un procedimiento ágil y rápido y que, en la mayoría de los casos, suele estimarse. En él se obliga al empresario a que cese en la conducta denunciada y a reparar los daños, incluso morales, causados al trabajador perjudicado.

Se defienden, por tanto, los derechos de los trabajadores frente a actitudes abusivas y se trata de lograr un trato justo y equilibrado para los empleados.

Enhorabuena a todos los trabajadores de todos los ámbitos, con el deseo de que se sigan reivindicando todas las mejoras que merecen.